Restaurante Botavara en Santanyí

Estuvimos aquí anoche, las tapas eran muy buenas, el personal podría haber sido un poco más atento, pero estaban muy ocupados, había un montón de clientes regulares entrando, así que debe ser consistentemente bueno. El bacalao en masa de tempura y los dátiles en tocino eran especialmente buenos, pero todo era bueno para ser justo.

En el puerto deportivo de Cala D'or descubrimos el concurrido restaurante Botavara y espontáneamente reservamos una mesa para la noche siguiente. A la hora acordada nos dieron un lugar en la terraza, desde donde teníamos una maravillosa vista del puerto deportivo en una zona donde están amarrados los yates un poco más grandes. La simpática bodega hablaba alemán y enseguida nos trajo los menús. Nosotros ordenamos: 1 cola 1/2 litro de vino blanco (José Ferrer) 1 x pan de ajo con queso 3 x pan con mantequilla y alioli 1 x dorada rebozada en sal 2 x lubina rebozada en sal 1 helado 1 x crepe con salsa de chocolate El vino blanco ya lo conocíamos de otro restaurante. La botella de 1/2 litro venía en una vinoteca. Dos camareros quitaron hábilmente el pescado al horno de sal sobre una mesa y lo sirvieron con patatas y verduras. Tanto la dorada como la lubina estaban cocinadas a la perfección, tiernas y jugosas. Fantástico. No hay nada mejor. Pedimos la factura, que nos trajeron enseguida. Todo junto por 111,90€. No es una cantidad pequeña, pero sí adecuada a la calidad ofrecida y a la maravillosa vista del puerto deportivo.