Restaurante BiEnara en Estella-Lizarra

Este plato, al estilo del aperitivo taiwanés Gua Bao, está relleno de pato pekinés. Es delicioso. Vine a este restaurante por casualidad para disfrutar de la comida china. Fue como descubrir un paisaje precioso después de varios días de peregrinación.

Fuimos a cenar un grupo de 13 personas un sábado. El local, con una decoración moderna y funcional, tenía un ambiente agradable y no estaba lleno. Cenamos en la zona junto a la barra, cómoda y bien acondicionada. El principal punto negativo fue la espera inicial: aunque éramos un grupo numeroso, llegamos pronto y el local aún no estaba muy concurrido, pero tardaron bastante en empezar a servirnos. Algunos platos llegaron con antelación, aunque no todos al mismo tiempo, lo que hizo que varios comensales comenzaran a cenar antes que el resto. Más allá de ese detalle, la experiencia fue muy buena: el espacio es agradable, el trato del personal fue correcto y la comida estaba muy rica. Además, el precio nos pareció bastante razonable para la calidad ofrecida.

De ruta por Navarra en bicicleta hemos parado a comer aquí por qué nos venía en ruta y las críticas eran buenas. La verdad es que no ha defraudado. Hemos llegado a las 13:15 y aún no estaba la cocina abierta, pero hemos esperado con una caña fresquita. A las 13:30 puntuales, ha salido una chica muy agradable para ponernos la mesa y tomarnos nota. Él local está muy cuidado y limpio, y la comida de calidad. El servicio amable y profesional. Es un muy buen sitio para comer. También las tapas tenían muy buena pinta. Muchas gracias!!!

Fuimos en familia con mis hijos y la verdad la comida es espectacular se nota que hayan gran chef al mando. El servicio muy agradable.

Me ha gustado su menú diario. La comida muy buena y buena atención del personal del restaurante.

Tuve una abundante y sabrosa cena de 3 platos aquí a última hora de la tarde después de terminar mi etapa del camino. La comida estaba bien presentada, la ensalada grande y fresca fue muy apreciada. El postre fue increíble... un coulis de frutos rojos con natillas y crema batida. Lo más destacado fue el excelente servicio del barman que manejó mi pobre español con paciencia y una sonrisa.

Fuimos recomendadas por un amigo y nos sorprendió! La comida muy buena, sobretodo el cochinillo que nos encantó y el personal muy amable.

Muy ricos todos los platos que probamos.

Me encantó este restaurante con guiños orientales. Empezando por la cocina y siguiendo por la decoración. Las verduras a la brasa con romescu que comí estaban espectaculares. Una pena no haber caído por allí un jueves para poder degustar el ramen, que tuve el presentimiento de que la chef los prepara de miedo.

Espectacular la comida tanto entrantes como los principales como los postres y el servicio. Repetiremos sin ninguna duda