RESTAURANTE BAHÍA en Cartagena

Si quieres pasar una velada muy especial, acércate a "La Bahía". ¡Estábamos simplemente emocionados! Y ahora vamos aquí al menos una vez cada día festivo y deleitamos nuestro paladar con las delicias más modernas. El ambiente, el servicio y los platos servidos: ¡simplemente excepcionales! ¡¡IMPRESCINDIBLE!!

Muy buen servicio comida 10 gracias a Kenia y servicio de 10 gracias a Rafa. Cartagena debe conocer esta gran sitio !!!

Kenia y Rafa han hecho de la cena una experiencia espectacular. Buen servicio y buena comida. De 10.

Me sentí como un establecimiento muy local, ¡nada turístico! La falta de inglés fue un desafío pero no insuperable y disfrutamos de un almuerzo fabuloso con excelente vino y deliciosas tapas. Servicio muy amable igualado por la calidad de la comida. Altamente recomendado.

Buen servicio, platos muy ricos y el camarero super amable. El vino Tres Olmos, el de la casa, super bueno. El tartar de atún inmejorable.

Muy buena experiencia! Fuimos de casualidad y comimos de la carta de tapas que tenía, todo genial relación calidad precio. Recomendamos muchísimo las croquetas de pulpo y bacalao, las marineras murcianas y la tabla de ibéricos. El servicio fue maravilloso, un chico jovencito muy agradable y atento. 10/10! Recomendamos sin duda

Ayer fuimos 4 adultos con dos mascotas a pasar el dia a Cartagena y nos topamos con el restaurante Bahía, la terraza y el ambiente nos llamó la atención y preguntamos. El camarero súper atento y amable en todo momento, una gran experiencia tanto la comida como el camarero. Todo lo que pedimos estaba buenísimo, especialmente recomendamos las croquetas de pulpo y bacalao, la tabla de embutidos ibéricos, pulguitas tanto de calamares como de ternera con tocino y el brioche de cordero con curry, espectacular todo. Los postres obligatorios siempre para endulzar el paladar después de la comida, sin duda alguna repetiremos cada vez que pasemos por Cartagena.

Nos lo encontramos de casualidad,buscábamos un restaurante con menú, algo sin pretensiones más que comer, era tarde. Vimos menú y precio, 17 €, y nos pareció interesante. Acertamos de pleno. Primeros: escalibada con bacalao y marmitako de marisco. Ambos buenísimos. Y de segundo solomillo con salsa de setas o arroz caldoso con espárragos y gambon. Buenísimos los dos, pero especialmente el arroz lo recordaré por tiempo. El servicio muy atento aunque algo bajo de personal.

Lugar muy acogedor, Con una amplia carta y sugerencias. La comída rica pedimos almejas, gamba blanca, gamba roja, tartar de langostino, croquetas de pulpo y bacalao lo menos a destacar, cuatro brioche ricos con ternera y chipotle, sobrasada xato, cordero y curry, calamares con wakane. En líneas generales todo bien lo recomiendo.

Lo mejor de este restaurante es la calidad de la cocina. Todo lo que probamos estaba riquísimo : croquetas de bacalao y de pulpo, la coca de sardinas y la marinera, diferente, muy buena. Lo mismo con los calamares negros, el tartar de salmón, etc. y cosas que vimos en otras mesas, tenían también una pinta buenísima. Eso sí, raciones muy justitas, y lo peor, y veo que es una queja generalizada, la lentitud exasperante del servicio. La chica no se entera, hay que pedirle tres veces una simple bebida. El aperitivo que ponen al principio muy rico pero no es correcto que lo cobren. Y la decoración, bien, moderna, pero muy impersonal, con cuatro retoques podría pasar a ser una clínica o una tienda de ropa. Puede que vuelva pero solo por su oferta gastronómica.