Restaurante ARP en Benabarre

Muy amables. Ibamos con dos perritas y nos dejaron comer en la terraza y tuvieron el detalle de darles agua. Comida casera muy buena

Durante un viaje entre montañas, tuvimos la suerte de parar en Restaurante ARP de Benabarre y fue un acierto total: un hallazgo que parece salido de otra época pero con la cocina de hoy en lo más alto. En plena Ribagorza, este lugar reúne comida casera tradicional a muy buen precio, y se nota que trabajan con producto de proximidad y mucho cariño. Pedimos huevos rotos con ceps y piparra, caracoles a la llauna, migas del pastor, un ternasco al horno y ¡jabalí con chocolate! Todo llegó con generosidad, perfectamente cocinado y lleno de sabor: el jabalí en particular nos dejó sin palabras, una combinación contundente que se ajusta a lo que uno espera en un festín de campo. 🍄🐖🔥 El servicio fue otro punto a destacar: muy amable, cercano y pendiente de nosotros en todo momento. No es de esos restaurantes “grandísimos”; es un sitio de los de siempre, de los que ya casi no quedan, donde te hacen sentir como en casa y cada plato parece salido de la cocina de tu tía favorita. 👨‍🍳🫶 Pequeños detalles que suman: ver que te ponen la ración de pan (y de calidad) por 1,20 € demuestra que aquí no están para inflar costes; es más bien lo contrario, y te hace valorar aún más el buen hacer cuando en otros sitios te clavan 5 € por un triste trozo de pan. Este restaurante es parada obligatoria si estás por la zona. Terraza-jardín bonita, entorno agradable y un producto que invita a repetir. Que restaurantes así sigan existiendo es una buena noticia para los amantes del buen comer. 🍷✨ En resumen: Restaurante ARP es ese lugar que encuentras por casualidad, donde comes como mereces, sin postureo y con alma. ¡¡Muy muy recomendable!!

Restaurante con terraza al aire libre muy agradable,la comida esquisita así como la atención por parte de la camarera

De camino al Pirineo hemos parado a comer y ha sido un acierto. Estaba todo sabroso, tienen comida casera de calidad. Cantidades generosas, el menú incluye pan, agua y vino. El lugar acompaña a la buena experiencia, dado que tienen una terraza al aire libre rodeada de vegetación. Hay aparcamiento en los alrededores y el precio es contenido. Volveremos sin duda.

Nos sirvieron las alcachofas a la brasa poco hechas y con carbonilla en las puntas. Algunos caracoles nadaban en aceite. El paté casero y el cordero, bien. A pesar de haber reservado con antelación nos pusieron en una carpa porque en la sala tenían celebraciones. Nos tuvimos que poner el abrigo en el primer plato. Con la estufa y las personas se fue caldeando la carpa. Una vez hecho el pago, la copropietaria nos acusó falsamente de haber hablado mal de uno de los platos con el comensal vecino. Tienen buena cocina pero, cuando la cantidad de gente les desborda, pierden la buena actitud. El personal de refuerzo poco profesional. LO siento, David, hasta ayer, siempre habíamos salido contentos.

Hemos comido de fábula. El servicio perfecto y el ambiente tranquilo.

Fuimos en familia, con dos niños pequeños, y todo fueron comodidades por parte de los trabajadores. Además, el menú estaba delicioso. Volveremos.

Comimos muy bien. Todo de muy buena calidad y a muy buen precio.

Veníamos de Viella el Día festivo de La Hispanidad, Abierto y trato de 10. Comida muy bien y más a 22€ Menu. Mucha variedad de platos en el menú. Como poco sitios ahora. Comimos Migas, escudella, y ternera a la jardinera y de postre 2bolas de helado de frutos rojos y trata de queso; todo muy bueno.

Un lugar inesperado justo al lado de Benabar... Aceitunas especialmente deliciosas, un vino rosado sorprendentemente sabroso y fresco... Costillas de cordero tiernas y un alioli sublime... Todo casero. Para disfrutar sin moderación. El observador convencido 🤗