Restaurant Fermin en Solsona

Fui con mi familia a celebrar el universidad de la mamá de mi esposo. Fue un gran placer.

Se come muy bien y con muy buen servicio

Un lugar para disfrutar, la comida buenísima y la bodega infinita, he ido 3 veces y siempre sales contento

Tanto la atención de todo el personal como el producto que hemos comido han sido excepcionales!! Volveremos sin duda!!

Experiencia muy gratificante en este restaurante de Solsona, ubicado a pie de carretera que te dirige a la Basella. El local es grande, amplio y espacioso, y dispone de un comedor interior con estufa de leña, que te hace estar en un ambiente muy agradable. La atención del dueño, Pere y la camarera, majestuosa, muy atentos y amables en todo momento siempre con una sonrisa en la boca. La comida muy sabrosa y rica, producto fresco, de calidad y muy bien tratado-sazonado. Se nota que en la cocina hay grandes profesionales que ponen amor y esmero para que los comensales salgan satisfechos. Hicimos el menú de mediodia a 25,00 € por comensal con 7 primeros, 7 segundos y 7 postres a escoger. Comimos de primero los canelones gratinados con bechamel, de segundo paletilla de conejo al horno y las gambas al ajillo con setas. De postre rematamos con el pastel de nata con azucar glacé. Todo muy rico, muy sabroso. Volveremos seguro, 100% recomendable por confortabilidad, atención y sabrosura de la comida. Si estás en Solsona y quieres comer bien con una gran relación calidad-cantidad-precio, el restaurante Fermín ha de ser tu elección. No te defraudará, te encantará. Unos cracks en todos los sentidos!. Incluso los baños estaban impecables, símbolo de un local emergente y bien atendido y el pan es elaborado por ellos con horno de leña, bravo!.

Un restaurante con comida hecha con cariño i buen producto, el sitio le falta una actualizacion, pero no es lo importante,

Mi marido y yo estuvimos visitando Solsona, un lugar maravilloso y nos acercamos a comer al Restaurante Casa Fermín. Fermín nos atendió de maravilla, ofreciéndonos un vinazo por copas (esto en pocos sitios se ve), además de una comida excepcional. Uno de los platos que nos pareció increíble, fueron los mejillones a la brasa. Un restaurante de 10! Para volver a repetir, sin duda.

Ambiente cálido y comida exquisita. El servicio nos dio toda clase de explicaciones a los platos y bebidas y, al finalizar, nos obsequiaron con un bonito detalle.

Espacio tranquilo, comida de muy buena calidad y buen servicio. Tienen una gran bodega (permite poder acompañar la comida con todo tipo de vinos según gustos del consumidor). Siempre es un acierto ir a comer, ya sea un día cualquiera como si se quiere realizar algún menú diferente para una celebración especial. Siempre te dan respuesta y proponen platos que se ajustan a lo que cliente espera.

Fuimos a cenar por mi cumpleaños y éramos 15 personas, era la primera vez que íbamos pero teníamos una buena recomendación. La verdad es que fue muy superior a mis expectativas. El Sr. Fermín tiene un trato individualizado impresionante, pocos quedan así. El te explica todo tipo de detalles si tú quieres claro, tanto de la comida , como de la amplia gama de vinos que ofrecen....con los niños esta super pendiente de ellos, y uno a uno les iba preguntando que les gusta para el postre, si habían cenado bien.... Ahora a parte del trato, la vocación, la cena estaba esquisita, tanto las carnes como el pescado, la calidad del producto marca la diferencia, y el cocinado paciente y con amor es la guindilla y el resultado final. Me sorprendió muchíssimo y me llevó un buen recuerdo de mi día tanto en el paladar como en el trato. Felicidades Se. Fermín por esta experiencia. Gracias