Restaurant Es Freu d'Orient en Bunyola

Este lugar es una verdadera joya. Ubicación excepcional y comida de alta calidad. Los dueños se encargan tanto de la cocina como del servicio, lo que crea un ambiente acogedor y una hospitalidad genuina. Un lugar muy agradable y auténtico, sin duda merece la pena volver.

Nos sorprendieron gratamente los atentos anfitriones y la maestría del chef.

Comida y personal fantásticos, un entorno precioso y tranquilo, y un verdadero placer ver platos como ganso y venado en la carta. Sin duda volveremos y lo recomendamos encarecidamente a quienes aún no lo hayan probado.

¡Nos encanta este restaurante! Lo hemos visitado tanto en verano como en otoño. La terraza en verano es encantadora, al igual que el acogedor interior con chimenea en invierno. Nos sentimos muy bienvenidos, sobre todo con nuestro hijo de dos años. En invierno, además, tienen un menú con platos austriacos muy reconfortantes, un agradable cambio respecto a la comida mediterránea que se encuentra en la isla. Mi muslo de ganso cocinado al vacío estaba muy tierno, y la col lombarda tenía un delicioso sabor a canela y anís estrellado. En general, se nota que utilizan ingredientes de alta calidad. La carta de vinos es pequeña, pero con buenos precios y algunos de los mejores vinos locales. La decoración es muy acogedora.

Pasamos varios días en el Hotel Nou Dalt Muntanya y cenamos a menudo en el restaurante del hotel, Es Freu, ¡una delicia siempre! El ambiente, sobre todo en la terraza al atardecer, es de ensueño. Todos los platos fueron realmente excepcionales: las gambas a la plancha, el tierno tataki de atún, la increíblemente aromática lubina y, por supuesto, el pulpo, que nunca habíamos probado tan tierno. Siempre que fue posible, atendieron nuestras peticiones especiales, y la crème brûlée de postre fue un auténtico éxito. El servicio fue siempre amable, atento y cálido; nos sentimos como en casa. Es Freu fue el plato fuerte culinario de nuestra estancia, ¡y ya estamos deseando volver! ☺️

El restaurante Es Freu d'Orient fue un verdadero punto culminante cada día durante nuestra estancia de una semana en el Hotel Dalt Muntanya. 🍽️ La comida fue simplemente perfecta cada noche: preparada con cariño, con ingredientes frescos y llena de sabor. Se nota el cariño y el alma que ponemos en ella. Petra y Patrick son increíblemente amables, y todo el equipo fue siempre atento, amable y profesional. Nos encantó especialmente Gabriel: con su cálida personalidad y su excelente servicio, creó un ambiente especial cada noche. Esperábamos con ansias la cena todos los días y nunca nos decepcionó. Un lugar maravilloso, un pequeño paraíso para disfrutar y relajarse. ¡Muy recomendable! 💛

Muy recomendable y merece la pena visitarlo. Una joya escondida en medio de la montaña con la comida más deliciosa y un ambiente relajado y fantástico.

Sitio tranquilo, buen servicio y comida de calidad, hemos ido con una promoción de the fork y excelente.

Los platos bien. Aunque pedí magret de pato muy muy poco hecho, rojo por dentro y me lo trajeron muy muy hecho. Ambiente agradable y personal atento. Aún así Relación calidad precio no compensa.