Regina en Santanyí

Esta noche, ¡comí el jamón más delicioso de mi vida! El stroganoff de res de mi novia también fue un éxito. El servicio fue amable y estuvo a punto de reír.

Fuimos porque mi acompañante necesitaba algo sin gluten. El personal se encargó de todo con amabilidad y seguridad. Sin embargo, la "recomendación diaria" (más bien una recomendación mensual, ya que el mismo cartel estaba frente a la tienda todos los días) era muy deficiente. No tenía nada que ver con el cochinillo. No me imagino a nadie más viéndolo de otra manera. En cualquier caso, 3 estrellas por el amable servicio y los platos sin gluten.

El personal nos recibió cálidamente en cuanto llegamos. El servicio fue muy amable. La comida estaba deliciosa y a un precio razonable. Recomiendo visitar el restaurante.

Lamentablemente, me decepcionaron los platos principales, incluyendo el pequeño trozo de salmón a la plancha, los calamares a la plancha y el filete gallego, casi sin salsa y con pocas verduras. Todos parecen platos comunes de un bar cualquiera, sin estética, sin cariño ni sabor especial. Quizás el chef estaba de vacaciones o había demasiados turistas en el mismo sitio. Lo mejor fue el wifi gratis y la rapidez de preparación. En resumen, no volveremos a este sitio.

Le ponemos 5 estrellas únicamente por hacerle el favor a Alex. Porque realmente han pasado algunas cosas que no muy bien. Fui con mi pareja y aunque yo tuve la suerte de que me tocaran cosas muy buenas, mi pareja, que encima se dejó un dineral, no lo paso muy bien. Las croquetas no las recomiendo, parecen como del Mercadona, PERO LOS CALAMARES! BUAH! Exquisitos, eso sí que sí. El solomillo caro, que no me acuerdo si hay más, pero el que costaba casi 30€ está tmb riquísimo y el brownie tmb estaba bastante bien, aunque he probado mejores. Ahora vamos con lo malo. Mi novio pidió el chuletón, pero justamente no había y tuvo que pedir una cosa que tampoco le apetecía mucho, que era el entrecot. El punto de la carne siempre lo pedimos lo menos hecho posible y se lo trajeron horriblemente cocinado, súper hecho. Cuando pedimos que lo cambiaran le trajeron otro con un punto bastante bueno, pero la carne estaba fría. Es evidente, para que la carne quede poco hecha sin estar fría hay que sacarla de la nevera, que esté a temperatura ambiente el máximo tiempo posible y luego a la sartén vuelta y vuelta. Pero como estropearon el anterior trozo el siguiente tuvo que salir frío, por lo que él no lo disfrutó en absoluto, habiendo tenido que pagar el segundo plato más caro de la carta (teniendo en cuenta que lo más caro no estaba aunque él lo quisiera pedir). La crema catalana tampoco le gustó. Volvemos un poco a lo bueno. Alex. Quien si que sabe trabajar allí. Nos dio dos sangrías de regalo y era quien realmente se preocupaba por nuestra buena estancia. Cuando nos preguntó qué tal la carne y le confesamos que no muy bien fue él quien nos ofreció traernos la piedra para cocinar nosotros los trocitos como queramos nosotros sin pasarse y que no quede frío. Cuando eso lo podían haber pensado Diego o los cocineros sabiendo que así de poco hecha recién sacada estaría fría. Además, destacar en general la buena vibra que transmitía Alex, a contrario de Diego mismo que solo se hacía el majo cuando se acercaba a una mesa a atender y lo único que hacía el resto del tiempo es hecharle broncas a sus compañeros. Quiero aclarar una cosa. He presenciado una situación en la que a una compañera de trabajo le escribieron un buen comentario y diciendo cosas malas sobre el jefe y le riñeron a ella cuando no tenía culpa de nada. Lo mismo pasa aquí, Alex lo único que nos pidió fueron las 5 estrellas y le hacemos este favor personal, pero el comentario es 100% nuestra opción sin influencia de nadie. Si fuera por nosotros le pondríamos menos, pero a mí la comida me gustó y en general no fue malo el trato. Pero por el precio que se pide y por el ambiente que hay entre los trabajadores no lo recomendaría a menos que sepáis a lo que vais Precios: - calamares - croquetas - solomillo - entrecot - brownie - crema catalana - bebidas TOTAL: ≈108€ más o menos

Alex nos hizo sentir como en casa desde nuestra llegada. La paella estaba buena y la sangría deliciosa, pero el servicio fue lo mejor de la noche.

Recomendable 100%. Toda su carta la tienen gluten free

Como familia de 7 (4 de ellos sin gluten), Regina's fue increíble y muy acogedor. Disfrutamos mucho de la comida, las raciones eran generosas, el servicio fue excepcional y las opciones sin gluten eran más que suficientes. De hecho, las fajitas sin gluten tenían un precio un poco más bajo que las comidas normales. En resumen, fue una primera experiencia fantástica y nos dejó el listón muy alto para nuestras comidas en Cala d'Or.

Fuimos a Regina debido a su reputación de comida sin gluten que demostró ser ricamente merecida. A mi esposa le advirtieron que todo en el menú, excepto las croquetas de papa, estaba o podía prepararse como GF. Nuestras comidas eran deliciosas (paella, pata asada de cerdo y un filete de atún GF + salsa de hierbas, pizzas para los niños). El servicio era excelente y los precios eran razonables, sin duda en volver.

Excelente noche en Regina con personal amable y servicial que nos guía a través de las opciones de menú sin gluten. Los hombres tenían filetes y las damas salmón a lo largo de varios entrantes. La comida y el vino era excelente. Muchas risas y bromas amables durante toda la noche, no menos el cargo de 1 centavo por las bebidas gratis que el anfitrión sacó de la factura! 😂 Noche realzada por el karaoke muy agradable jugando cerca al agregar a un ambiente estupendo con la gente bailando junto a sus mesas. Sin duda volveré!