Ramen Shimoji en Bilbao

Uno de los mejores ramen que he probado en mi vida

siempre estupendo, delicioso el ramen y muy buena la atención

Todo riquísimo. El ramen de curry es increíble. Como pega, que solo haya una hora para disfrutar de la comida, pero se puede entender. El mejor ramen que he probado nunca.

El mejor ramen de Bilbao sin duda alguna. Muy autentico. El servicio atento, rápido y cordial. Un 10. Pedidos para 2 gyozas, kimchi, ramen de temporada (con queso) y ramen miso. Nos gustó más el miso, aunque está bien probar diferentes para apreciar los sabores. Volveremos

Una comida excelente, el mejor ramen que he probado. Pero tardaron muchísimo en atender y servir, solo tenían a una persona para toda la sala. Una pena, podría ser un sitio buenísimo, ojalá lo mejoren.

He estado probando todos los restaurantes de ramen que han ido surgiendo por Bilbao y he de decir que por fin podemos probar el auténtico sabor de un ramen aquí. No probaba uno tan delicioso desde que estuve en Tokio hará unos años. Probé el ramen de Miso y helado de té verde. Lugar tranquilo, quien regenta el local es muy amable. Totalmente recomendable si quieres probar un ramen de verdad.

Pedimos de entrantes gyozas de carne y brocheta de carne de cerdo, ambos muy ricos. El ramen de trufa estaba genial tambien, pedimos extra de huevo por 1,5€ mas. Finalmente, pedimos helado de matcha y mochi de tarta de queso que estaba increible. El que nos atendió era muy atento y majo, ayudando en todo lo posible. Recomiendo ir a comer Ramen, sin duda uno de los mejores que he comido!

Ayer fuimos por primera vez a Shimoji y pedimos Kimuchi de entrante y un ramen para cada uno, de curry y Shio, ¡muy bueno todo! Se nota que son caseros, las sopas y el chasu están muy buenos. Tienes la opción de añadirle toppings extra. No hay mucha variedad en carta, pero es más que suficiente. Importante: hay que ir con reserva. Pagamos 35€ por los 3 platos y dos cervezas Asahi. Volveremos pronto para repetir y probar otros ramen :)

Restaurante japonés en una zona un tanto apartada de Rekalde, rodeado de fábricas. El menú completo con entrante, ramen, bebida y postre son 20€, muy asequible. Puede ser difícil elegir porque según los ingredientes del entrante, habría que sumar 1€. El servicio se maneja en castellano más o menos, y lo digo poque pedimos unas gyozas de cerdo y nos trajeron vegetarianas, y de postre pedí un mochi de chocolate y lo trajeron de tarta de queso. Aparte de eso, el ramen de pollo y cerdo con ebi miso muy contundente y rico. Me decepcionó un poco la ambientación, poco cuidada, con la barra de bar y los ventiladores en el techo, propio de un bar español típico de los años 90.

Nos han atendido super rápido El local nos ha gustado mucho, tiene encanto . Y el ramen riquísimo y bien de precio Muy recomendable