Pou de Beca en Vall d'Alba

Fui a cenar con la pareja y todo genial... La atención exquisita, la comida genial.. Un sitio que no defrauda

Situado en el corazón del Pla de l'Arc, El Pozo de Beca presenta una propuesta otoñal que hace homenaje al producto local con creatividad, tradición y un profundo respeto por los sabores de la tierra. Su “Menú Otoño” es una muestra de cocina de proximidad cuidadosamente elaborada, con ingredientes de kilómetro cero y una clara sensibilidad hacia el punto ecológico y artesanal. Desde el principio, los entrantes sorprenden por el equilibrio y la riqueza de matices: el pan de pueblo con tomate de colgar y aceites de oliva virgen extra marca el tono del que está por venir, seguido de propuestas tan originales como el tártaro de tomate azul y rocío con atún y calabacín, o las judías verdes del confit de Viver por su frescura y armonía, sin olvidarnos de las crepes de algarroba y arroz, pato del Mas de Peregrino e higos, que son toda una experiencia. En los platos principales, la mesa se divide entre dos opciones: el arroz meloso del día (en este caso, de pescado) y los raviolis caseros de setas silvestres con salsa de queso Peñablanca. El arroz, perfectamente cocinado y lleno de sabor marino, es un acierto para los amantes del buen arroz valenciano: meloso, intenso y con un sabroso fondo. Por su parte, los raviolis son una auténtica delicia otoñal: pasta artesanal rellena de setas de temporada, acompañada por una salsa suave y equilibrada, en la que el queso acompaña sin tapar. El postre mantiene la línea de productos autóctonos con un toque casero. La tarta de queso, la cuajada de leche de oveja y los Gelatz de Atzeneta son opciones ideales para acabar con dulzura, sin excesos. Por 36 € por persona, el menú incluye pan y agua de Benassal, y se sirve por mesa completa. Una propuesta honesta en precio, excelente en calidad y ejecutada con mucho cuidado. No es la primera vez que vamos, y seguro que no será la última tampoco. El Pozo de Beca es mucho más que un restaurante: es una declaración de amor al territorio ya sus sabores. Ideal para quien busque una experiencia gastronómica auténtica, consciente y ligada al entorno rural de Castellón. El “Menú Otoño” es una magnífica manera de descubrir lo mejor de la estación en un ambiente acogedor, con una cocina que sitúa al producto como verdadero protagonista.

Es maravilloso!!, el lugar, la comida , la atención !! No le falta nada, recomendable 100 x 100.

Mi experiencia ha sido estupenda, tanto la comida, como el alojamiento son de diez. Nicolás y Sonia te atienden muy bien, son unos anfitriones fantásticos. Es un sitio muy recomendable

Espectacular! Trato y comida de 10!

Fui con mi familia por primera vez a comer a su restaurante y no puedo decir nada malo. El lugar precioso, el salón acogedor, la atención muy buena y la comida casera que siempre se agradece! Lo recomendamos 100%!!

Simplemente, PERFECTO Cuando haces de tu trabajo tú pasión, el resultado es perfecto. Establecimiento, personal, comida Parada obligada si se busca un establecimiento donde descansar como si estuvieras en tú casa. Felicidades y gracias

Probamos el restaurante con unos amigos de la zona. Sin Maps no llegas. Descubrimos ese cuidado por el producto magnífico, elaboración gloriosa, Se nota que es de cercanía, que ha salido de la zona y es muy fresco. La berenjena... El arroz... Servicio de 10 plenamente recomendable. Repetiremos.

De los mejores restaurantes de la zona.

Espectacular. Los entrantes deliciosos y el cordero a la miel de 10. Calidad precio muyyy bien. Repetiremos seguro. El comedor tranquilo y el sevicio de primera