Portosenso Bar en Altea

Precioso lugar , decidimos pedir mas tarde el segundo plato y después , como se retrasaba nos inquietamos y Laura , muy servicial y con gran sentido de la responsabilidad , se preocupaba ella pero túvimos la culpa nosotros.En cambio la otra camarera nos regañaba y ,además,delante de los clientes.Se necesita en el mundo gente buena y responsable como Laura.

Comimos aquí el domingo y fue una experiencia inolvidable. El lugar es espectacular, y tuvimos la suerte de que nos sentaran en la mejor mesa: la que está justo al borde del mar. Parecía que estuviéramos comiendo en un barco, con los peces nadando bajo nosotros. Un entorno único y muy especial. La comida nos sorprendió gratamente. Pedimos calamares a la romana con mayonesa, y puedo decir sin exagerar que han sido los mejores que he probado en mi vida: crujientes, nada grasientos y con un sabor espectacular. El pulpo a la plancha sobre puré de patata también estaba delicioso, muy tierno y lleno de sabor. Los huevos rotos con jamón estaban buenos, aunque la yema estaba algo espesa y eso dificultó mezclarlos bien. El servicio fue muy bueno, a pesar de que el restaurante estaba lleno y eso hizo que tardaran un poco más en sacar algunos platos. Se notaba que estaban a tope, pero aun así el trato fue excelente. Queremos destacar especialmente al camarero más mayor, muy amable y cercano, aunque todo el personal fue atento y profesional. Como detalle final, nos ofrecieron unos chupitos de crema de cortesía, lo cual siempre se agradece. En resumen, un lugar muy recomendable por su entorno, comida y atención. ¡Volveremos sin duda!

Un sitio maravilloso para picar algo viendo el mar, el puerto deportivo y disfrutar de un lugar de paz y vistas preciosas.

Restaurante muy agradable con terraza en el mar, en Altea. Comida muy correcta

Este sitio me encantó. Llegamos por casualidad después de una ruta en bici y no podíamos haber elegido un mejor sitio. Muy buen servicio, comida buena y sitio para dejar bicis.

Qué lugar tan encantador para comer. Comida deliciosa, buen servicio.

Portosenso Bar tiene una ubicación privilegiada. Sentarse allí en plena salida/entrada al puerto y tomar algo es un privilegio. Comimos tres personas un día de Semana Santa y fue todo un acierto. La comida estaba muy buena, raciones generosas y todo fresquísimo. Y tienen unos vinos bastante interesantes. El personal nos trató estupendamente con mucha atención a pesar de estar el sitio a tope de gente. Especialmente Joan, un chico la mar de agradable, que nos atendió a nosotros y a los demás con una sonrisa que daba gusto. Gracias... Volveremos seguro

Descubrí Portosenso Bar en Altea casi por casualidad, y fue una experiencia mucho mejor de lo que esperaba para una parada rápida. El lugar tiene una ubicación privilegiada frente al puerto, con una terraza muy agradable y tranquila, ideal para desconectar un rato mientras disfrutas de las vistas al mar. Pedí un bocadillo de Bribón, que estaba realmente bueno: pan crujiente, bien relleno y con ingredientes de calidad. También probé la ensaladilla rusa, que me sorprendió gratamente. Estaba muy cremosa, con buen equilibrio de sabores y presentada con mimo. Para picar, acompañamos con unas clásicas patatas de bolsa —un toque informal que no desentona en el ambiente relajado del sitio— y dos cañas bien tiradas, frías y con la espuma perfecta. Se nota que cuidan los detalles, incluso en cosas tan simples. La atención fue amable y rápida, sin agobios pero siempre pendientes de lo que necesitábamos. Es de esos sitios donde te sientes cómodo desde el principio, sin pretensiones pero con gusto. Ideal para tomar algo a media tarde o hacer una parada ligera sin renunciar a la calidad. Sin duda, un sitio al que volvería, ya sea para algo informal o para disfrutar más a fondo de su carta.

Un lugar casi de ensueño, donde estás disfrutando de una cerveza o una comida casi dentro del mar