Porto Bello en Orpesa

Espectacular toda la comida 😋😋😋😋

Buscamos un sitio para comer por la zona de Marina d'Or y por la pinta desde fuera, elegimos este restaurante. Muy cuidado, con muchos camareros, y muy limpio. Reservamos para no tener problemas y tiramos de menús bastante ajustados. Comida de calidad y buen ambiente y servicio. Si fuéramos por allí, repetiría. Negativo: Lo de las tarrinas para los menús de niños y si no quieren deben pagarse polos de la carta de helado, y que no se ofrezca pagar la diferencia o ofrecer un cafe a cambio. Un detalle que gusta. Buen restaurante y con ganas de hacer las cosas bien 😉

Buena comida a buen precio. El servicio es rápido y correcto. Si buscas comer decentemente y no gastarte mucho dinero, este lugar es una muy buena opción. Sin pega alguna, recibimos lo que esperábamos. Muy buena combinación entre calidad y precio.

Comida excelente y un trato muy bueno sin duda repetiré

Cenemos muy bien y todos los trabajadores son muy amables,simpaticos y sobre todo rapidos

Servicio excelente muy ágil y personal muy amable, la comida con buena sazón, buenas porciones. Recomendado!🌻🔆

Hemos estado cenando más de 15 personas y la verdad que todo muy bien, nos han atendido de 10, la comida ha salido al tiempo y todo muy bueno. Recomendación: torreznos, son brutales !!!!!!!

Una experiencia al horno de piedra: La mejor pizzería de la ciudad Desde el momento en que cruzas la puerta, el aroma irresistible a masa recién horneada y albahaca fresca te envuelve como una cálida bienvenida. Esta pizzería no es solo un lugar para comer, es un refugio para los amantes auténticos de la pizza. Cada pizza es una obra de arte: la masa, ligera y crujiente, lleva el sello inconfundible de una fermentación lenta y cuidadosa. Los ingredientes, fresquísimos, parecen contar su propia historia: tomates que aún saben a sol, quesos que se derriten en un abrazo perfecto, y un aceite de oliva que acaricia el paladar. El menú ofrece desde las clásicas Margheritas, ejecutadas con una perfección casi poética, hasta creaciones originales que sorprenden en cada bocado —como una pizza de pera caramelizada, gorgonzola y nueces que redefine lo que creemos saber sobre el equilibrio de sabores. El servicio es tan cálido como el horno de leña, atento pero nunca invasivo, logrando que cada visita se sienta como una comida en casa de amigos apasionados por la cocina. En resumen, esta pizzería no solo sirve comida, sirve momentos memorables, cocinados a fuego lento y sazonados con cariño. Un rincón que invita a volver... una y otra vez.

Muy buena atención, equipo joven y dinámico que está atento a cualquier necesidad. Torreznos y hamburguesas muy ricas. Lo recomiendo

Menús todos los días y a buen precio ya que son 3 platos. A pesar de haber mucha gente, el servicio ha sido muy rápido. Restaurante en Marina D'or para ir a comer en familia o grupo de amigos.