Pizzería Acqua e Farina en Valencia

Fuimos por las reseñas en Google y la puntuación. No me ha parecido el mejor restaurante italiano en Valencia, ni por la oferta de platos, ni por el sabor de los mismos, ni por el local o el servicio; nos sentaron en la mesa más cerca de la barra, habiendo otras mesas libres en el local, lo cual hizo que mientras mí pareja y yo cenábamos teníamos a los clientes que venían a recoger las pizzas para llevar parados justo al lado.Aprobado justo.

Pedimos pizzas e increíbles. La masa es espectacular, muy finita y con los bordes grandes. De postre pedimos el tiramisú casero. Volvimos a repetir antes de irnos!

Busqué esta pizzería por las reseñas y debo decir que superó mis expectativas. El restaurante tiene un pequeño comedor con 7-8 mesas y algunas mesas en la terraza, y ofrece comida para llevar o a domicilio. El dueño es italiano y ofrece un producto que refleja la tradición. Las pizzas son excelentes y los ingredientes son de alta calidad. Probamos la focaccia de Apulia con burrata, rúcula y jamón, y la Biancaneve, a la que le añadimos tomate fresco. El servicio fue rápido y el dueño muy amable. Los precios son normales para la zona, pero el producto es de alta calidad. Si estás por la zona y quieres comer buena pizza italiana, este lugar es muy recomendable.

Pese a que soy el vecino de negocio y me dedico al ejercicio físico, considero indispensable esos momentos de pizza y amigos puntuales en una de las mejores pizzerías de valencia. Sus sabores diferentes y la calidad con la que están hechas te dejarán sin palabras.

Esta pizzería es el ejemplo perfecto de que no hace falta lujo para ofrecer una experiencia inolvidable. El ambiente es sencillo pero acogedor, ideal para relajarse y disfrutar. Las pizzas son una explosión de sabor —ingredientes frescos, combinaciones sorprendentes y una masa que engancha. El servicio, siempre atento y amable, redondea una visita que seguro querrás repetir. Un imprescindible del barrio.

Excelente pizza, quizás la mejor que he probado jamás.

Buena relación calidad-precio. No está mal. Probamos la diavola y la de zucca. Puntos positivos: la masa es casera y está hecha al punto, sin quemazos ni cosas por el estilo. Puntos negativos: ponen bacon en vez de porchetta, así que no acaba de tener el sabor típico italiano. La mozzarella mejorable. En definitiva, está bien relación calidad-precio, aunque las hay mejores.

Como italiano le doy a esta pizzería: 4/5 ⭐⭐⭐🌟🤌 Es buena, la comida es realmente italiana.

¡Pizza riquísima! Y muy tranquilo: vine a charlar con mis colegas, conversamos y comimos delicioso.

Todo estaba riquísimo. El sitio es pequeño pero muy acogedor, con un ambiente tranquilo y familiar. Todo parecía auténtico y cuidado al detalle, desde los sabores hasta la atención. Se nota que lo hacen con cariño. Sin duda, volveremos. ¡Un pequeño gran descubrimiento! ☺️💕👌🏻