Piccolina en San Sebastián de los Reyes

Un sitio muy acogedor, con un trato muy cercano. En todo momento el propietario estuvo pendiente de si estábamos conforme con la comida y todo era casero y natural, como además nos explicó. Una muy buena comida italiana, casera, con buena relación calidad-precio y que va ganando humildemente premios!!! Repetiremos.

De los mejores sitios donde he comido. La atención del camarero que nos atendió fue increíble, nos explicó cómo eran los platos que habíamos pedido, incluso nos dijo que si no nos gustaban podríamos pedir que nos lo cambiasen, cosa que no pasó, ya que estaba todo muy bueno. Se notaba que muchos de los platos eran caseros, la calidad era increíble. Y acostumbrada a otro tipo de franquicias donde los precios son bastante elevados para todo lo que pedimos nos costó 22 euros por persona, contando que pedimos bebida plato principal y postre individual.

Un sitio de comida casera muy cuidada. El trato del personal, en concreto de Jorge y también de la cocinera, espectacular. Nos explicaron todo con mucho detalle y muy amablemente. Fuimos un grupo de 9 personas y pedimos pizzas, pastas, lasaña… Y estaba todo muy muy rico! Súper recomendado. Muchísimas gracias, volveremos!

Hemos cenado y nos han recomendado muchos platos caseros, uno de ellos es el Pasta di Pera, estuvo muy rico y con muy buena pinta, comimos también de entrante el provolone y estaba muy delicioso. Siempre están atentos a si te gusta todo, y te ayudan sobre qué platos son los mejores, sobre todo Pedro que nos encanto su trato. Lo recomiendo mucho para poder pasar una buena tarde o noche en familia o con amigos.

Todo muy bueno alguna vez había pedido la pizza rossi para llevar que en lo personal me gusta mucho, pero esta vez es la primera vez que vengo a comer y me recomendaron la pasta di pera y la verdad que me sorprendió para bien una muy buena elección si te gusta probar cosas distintas. Cenamos para dos y con un entrante y dos platos principales una pasta y una pizza más postre acabamos satisfechos

Lo que al principio iba a ser una simple comida, acabó siendo una auténtica experiencia que desearía revivir volviendo a este lugar. Solo esperaba encontrar un lugar para comer, ya saben, lo típico, abres Google Maps y buscas "Restaurantes cerca de mí" y te guías por las opiniones de los demás sin entrar en mucho detalle. El precio nos venía bien, las reseñas eran buenas, no estaba lejos... ¡Adelante! Nada más llegar pudimos ver aquél pequeño local, situado en una esquina, discreto. En un principio he de decir que no me inspiró mucha confianza por su apariencia exterior, pero ya saben, las apariencias engañan... Además, nos hizo mucha gracia el cartel en el que se especificaba que dentro no había sala de apuestas, ni máquina de tabaco (Declaraciones que personalmente me parecieron muy correctas, e incrementaron mi afinidad con los valores de este negocio) Cuando entramos, le preguntamos al hombre que había en la barra si podíamos comer 4 personas. -Tienen reserva? Noté una gota de sudor en la frente -No, no tenemos. Mientras el hombre echa un rápido vistazo a las mesas en el interior, yo ya me estaba maldiciendo por no haber pensado antes en que podría pasar algo así. Fuimos en hora punta, 15:00. -No se preocupen, sientense en esta mesa - Nos dijo amablemente. Momento de relax. Aquí es donde empieza la magia. Él solo se estaba acercando, pero ya se sentía, lo traía consigo en al ambiente. Aquél no era un camarero, era EL camarero. Nunca, y quiero decir NUNCA he sido tratado con tanta profesionalidad y familiaridad en un bar/Restaurante. Aquél hombre simplemente tiene un don. No estoy exagerando. Nos explicó que podíamos preguntar por la elaboración de cada plato, y nos comentó cuáles eran los clásicos, y los que ellos mismos habían ingeniado. Como hay tantísimas cosas en carta, no nos decidíamos qué pedir. Y aquí llega... -Les voy a traer algo que les va a encantar _Pero... ¿qué es? -No les voy a decir, porque si les digo no lo van a querer, pero no se preocupen, está bien disimulado, y si no les gusta, son libres de devolverlo. Y así mismo sucedió. Y tal como él predijo, el plato literalmente nos encantó. No diré qué era, guardaré la magia para ustedes cuando vayan ;). Y qué hablar del resto de la comida. Cada uno de esos platos era digno del más fino paladar, todos excelentes y caseros. Además, su precio erá excelente, la calidad buenísima y del sabor ya está todo dicho. En resumen. Una experiencia con un trato inigualable, como para volver cada vez que uno esté cerca de la zona de Madrid! Un saludo a todos y sigan haciendo así las cosas, da gusto ir a lugares así, y no quedan muchos!

Fuimos una noche a cenar, sitio acogedor, nos trató el camarero MUY BIEN, en pocos sitios nos han atendido tan bien, super amable y explicándonos todo del menú, le comenté que soy intolerante a la lactosa y salio hasta el cocinero para asesorarme con la comida, todo riquísimo, ensalada templada de rúcula y queso,pan de la casa, setas, Pasta de Langostinos Rellenas de langostinos con salsa de gambas, Profiterole Bombas de nata helada con salsa de Chocolate o Dulce de leche, buenísimo todo, 59 euros la cuenta, no me parece nada caro para la calidad de la cena, en Madrid y resaltar la AMABILIDAD, BUEN TRATO DEL CAMARERO Y DEL COCINERO, volveré si estoy por la zona y lo recomiendo

Buena comida, buen servicio y atención. Merece la pena dejarse por llevar por las recomendaciones del dueño. Gratamente satisfecho.

Ha sido la segunda vez que he estado en este restaurante, especializado en comida italiana. ¡Es uno de los mejores que he visitado en los últimos meses! La comida es muy muy buena: es el punto principal. Tienen platos originales, creados por el dueño, además de pizzas y pastas muy buenas. Lo recomiendo! ⭐⭐⭐⭐⭐

Comida italiana espectacular. Los dueños muy amables, nos han recomendado y hemos acabado muy satisfechos, volveremos.