O Piorno en Santiago de Compostela

Buena comida, buen servicio y buen ambiente.

Pedimos pulpo a feira, raxo, huevos con patatas y chorizo y zamburiñas. El pulpo decepcionante, un punto duro pero no como para no ser disfrutable, el resto perfecto. El raxo, en especial, excelente. Precios normales para estos productos, bien ajustados.

Local muy tranquilo y con una cena exquisita, muy bueno!

Bien vale la pena dedicarle tiempo a disfrutar de una comida de mar excelente y rápida.

Fueton encantadores y la comida exquisita

Muy buena atención y excelente comida

Muy recomendado de los mejores de Santiago

Buen sitio para picar o comer de tapas o tixolas

Excelente carta para cenar y excelente trato, repetimos dos cenas y no fue mas porque nos marchamos de Santiago. Nos lo recomendaron en el hotel y la recomendación no pudo ser mas acertada

Estaba cerca del alojamiento donde estuve un par de días y el primer día fui a comer aquí por la cercanía y las buenas valoraciones. Cuando entré me acomodaron en seguida y sin problemas pese a ser una persona sólo, el servicio fue muy amable y la comida estuvo muy buena. Por lo que vi es un sitio muy familiar y la mayoría de la gente que entraba era local, por lo que se debe comer muy bien habitualmente. Tenían una carta bastante extensa y los precios acorde al producto, yo en mi caso estaba recién llegado a Galicia y tenía que probar el pulpo y las zamburiñas sí o sí, claro al ir solo con esto ya tuve más que de sobras y no pude probar más cosas de la carta porque ya estaba más que lleno. Tanto la calidad del producto como las raciones no puedo decir más que buenas palabras, muy bueno de sabor y muy bien cocinado. Pagué casi 50 euros, con todo lo que comí, más varias copas de vino, postre y café. A ver si miras el precio barato a simple vista no es, pero en mi caso comí pulpo y zamburiñas que tienen el precio que tienen y la calidad era fantástica, al ir sólo también suele subir mucho más la cuenta que si vas varias personas y compartes entrantes y botella de vino. Yo para lo que comí y bebí es un precio más que razonable la verdad.