Lugar de solera, donde disfrutar de una pizca de ambiente y comida andaluces en Valladolid. Con platos bien cocinados y un toque algo recio en servicio y parroquia.
Este bar me encanta no pueden estar más ricas las tapas típicas andaluzas cazón en adobo y los calamares, siempre con la consumición te dan unas aceitunas manzanilla ricas