Muiño de Rudiño en Ribadumia

Muy flojo y de más a menos! Nos encantó la idea Omakase del restaurante y que es súper acogedor y la bodega que tiene impresionante. La comida puede dar mucho más de si aprovechando un poco más el producto de la zona; no usar un marisco o pescado de la zona…(aunque sea mejillon y jurel) creo que se puede esperar más cuando pagas 50 euros por el menú y comparas la competencia que hay. Lo peor del menú sin duda el postre sin alma y sin ganas, pensábamos que era el pre postre, un poco de crema pastelera y caramelo de bote? Y la berenjena de guarnición de la carne estaba helada…Lo mejor el ravioli con choco y la burrata. Quizás tuvimos mala suerte ese día con la elección del chef, volveremos en otra ocasión a ver si tenemos mas suerte. Una pena la verdad, porque como repito la idea es muy buena.

Espectáculo en estado puro para nuestros paladares. Lo que nos hizo sentir Teo en cada plato es indescriptible. Y la carta de vino es de escándalo. Me quedaría a vivir ahí. Es un lugar que te atrapa tan pronto cruzas la puerta.

Excelente parada especial para almorzar en el Camino. Precio fijo 50€ más bebidas.

Lugar con mucho encanto, fusión italiana con producto de mercado. No sabes lo que vas a comer y es parte del atractivo. Personal amable y formado, muy buena carta de vinos en un lugar súper acogedor.

No hay carta. Menú degustacíon increíble d rico. Comida italiana española. Explican todo. Vinos buenísimos. Y sorpresa para comer. Me encanta.

La atenciòn es excepcional. La comida, de lo mejor que he saboreado, a lo largo y ancho del planeta. Siempre tiene un buen producto, dirìa que hecho con esmero y buena mano para èllo. A un precio, econòmico para todo lo que te ofrecen. Con una selecciòn de vinos, como pocas !!! Vamos, que cada vez que voy, màs me encanta !!! Enhorabuena por toda la dedicaciòn y amabilidad. Hay pocos sitios como èste !!!

Comer un menú degustación en un lugar pequeño pero con encanto. Menú degustación a ciegas, te van explicando los platos a medida que te sirven, una mezcla de comida italiana y gallega, estaba todo muy rico. Muy recomendable, se nota el mimo con el que está realizado cada plato. Comentar también que tienen una amplia carta de vinos.

Experiencia inolvidable, comida en parejas, los llevé sin saber a donde iban, sin crear expectativas, el resultado? Genial. Un proyecto con alma, con mucha personalidad, de los que no se encuentran muchos. Menú muy disfrutón y completo, no tenemos fotos porque nos centramos en disfrutar. La carta de vinos, un espectáculo. Un lugar de culto al vino. Volveremos seguro!!

Es una experiencia única, no hay carta, solo tiene un menú alternativo para intolerancias por lo que cada visita es una sorpresa. El sitio es un antiguo Muiño restaurado lo mínimo para no perder su encanto. El cocinero se preocupa y habla con sus clientes para ver cómo va todo. Impresionante la carta de vinos.

Una gran experiencia el no saber qué platos vas a tomar. Todo increíblemente rico, con mucho sabor y matices. Muy bien explicados los platos y excelente servicio.