Acogedor, atención buena y tapas excelentes
SERGIO
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01 Septiembre 2025
10,0
Muy buenos los pimientos rellenos de carne en salsa de pesto, del menú.
Teo BB
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30 Agosto 2025
10,0
Fuimos un poco tarde y comimos a la carta. Pedimos algunas raciones como migas, longaniza de graus, croquetas,…Todo muy rico. Buen servicio en un lugar muy original.
Agoney Duque
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26 Agosto 2025
10,0
Estuve poco tiempo pero me gusto
Número k salen El poder
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25 Agosto 2025
10,0
Muy buen restaurante, buen servicio, buen ambiente. Peeroo le falta postres caseros, no hay ninguno.
kike alcaraz
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24 Agosto 2025
6,0
Vinimos con amigos esta noche, ¡todo estuvo genial! Nada de qué quejarse, un camarero estupendo y la comida buenísima.
liaa dagl
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22 Agosto 2025
10,0
Sitio con muchísimo encanto! Comimos tapas y muy bueno la verdad. El pan buenísimo! Recomendable si estás por Zaragoza de visita a la Basílica!
Natalia
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22 Agosto 2025
10,0
Fiel a mi desayuno o almuerzo en Montal, a veces en Terraza y otras en la Despensa, es comenzar el día con excelencia, y muy especialmente, doy las gracias a Laura, y de cómplice tengo a Diego, que sabiendo del buen hacer de las manos de Laura, él si no me dice lo contrario, es quien elige mi almuerzo conociéndome como uno más de casa, trayéndome a la mesa la tortilla que cocina Laura, transformando dichos ingredientes simples en momentos memorables. Su tortilla, es una auténtica joya: tierna, jugosa y perfectamente equilibrada, una delicia que conquista desde el primer bocado.
En Montal, no solo se desayuna o se almuerza: se disfruta, se saborea, se vive. Y eso es mérito de Laura, cuya pasión y talento elevan cada plato. Cada porción refleja un profundo conocimiento del producto, una ejecución impecable y un respeto absoluto por los sabores auténticos. No lleva mucho tiempo como miembro del elenco, pero es como si llevara toda la vida en Montal, haciéndose con el reflejo perfecto de la exigencia de su idiosincrasia y de los paladares más sofisticados. ¡Es, sin duda, una delicia que marca la diferencia en los desayunos y/o almuerzos de Montal! Laura no solo cocina, sino que transmite pasión apasionada en cada plato. Su tortilla no es simplemente un alimento: es una experiencia que invita a comenzar el día con una sonrisa y el paladar satisfecho. Gracias por hacer de cada desayuno una experiencia única que define Montal en sus dueños de ahora y sus progenitores.
J. Guillermo Nicolás García
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21 Agosto 2025
10,0
Restaurante de renombre en Zaragoza, situado en una de las plazas más emblemáticas del casco histórico. El local destaca por su cuidada decoración y su agradable ambiente, además de ofrecer varias propuestas gastronómicas y una tienda gourmet que complementa la experiencia culinaria.
El menú del día, disponible de lunes a viernes por 18 euros, resulta correcto en cuanto a variedad y presentación, aunque encontramos ciertos aspectos mejorables. En nuestra visita, los platos llegaron a la mesa templados, casi fríos, lo que deslució en parte la experiencia. La bebida incluida en el menú también se queda corta: si optas por vino, la copa es bastante escasa y no alcanza para acompañar todo el servicio.
Un aspecto que nos decepcionó especialmente fue la gestión de las intolerancias alimentarias. A pesar de haber indicado en la reserva que mi pareja es intolerante a los lácteos, no se tuvo en cuenta y le sirvieron un plato que incluía un tomate persillade, preparación que desconocíamos que contenía queso. No se nos informó de este detalle, y cuando lo comentamos al camarero, retiraron el plato… para devolverlo simplemente sin el tomate. ¿Realmente no había tomate sin queso?
En definitiva, un menú del día que no se diferencia demasiado del de otros establecimientos similares, aunque el entorno, el local y su reputación aportan cierto valor añadido. Aun así, queda claro que hay margen de mejora, sobre todo en la atención a los detalles y al cliente.
Antonio F
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12 Abril 2025
8,0
Llevo yendo a Montal desde hace 33 años, y sigue siendo para mí, el mejor restaurante de Zaragoza y uno de los mejores a nivel mundial. María y Nacho, siguen dando esa modernidad versus clasicismo a lo que sus padres así concibieron la idea de un lugar tan acogedor e insólito donde pertenecer a la más alta aristocracia de los sentidos, el del gusto, que unido a los restantes, el comensal siente y luego piensa tan adorable visión. Inmerso en una casa como palacio con su patio de las conchas. La propia intimidad invita a confidenciar la relación gastronómica-secreta. La lengua no tiene huesos pero aplasta con deleite desesperado el paladar más exquisito. Mente culinaria compleja y gustos sencillos. La sabiduría de la alta alimentación unida a pequeños detalles que gustan cuando uno está saboreando. Ambos, primos hermanos, son el progreso culinario sin dejar en el sabor la ambrosía de los ideales entrantes, antesala de la directa consumación de platos elaborados, sofisticados, reminiscencias de la cocina a fuego lento, como hacía la abuela. Su entorno, no solo crea la belleza sino que invitan a verla más con el cromatismo de cada color, portador de distintas atmósferas en su distribución. Montal, sigue evocando a venero apuntes de un subsuelo gustativo que inicia como representación de quienes les han precedido en su hacer profesional. Toda conversación debe detenerse cuando el personal que le atienda, le detalla con todo conocimiento el plato que va a degustar. Montal lo tiene todo: clase, elegancia, pureza, permanencia en boca, la esencia de lo esencial de un don como sazón especial de la familia Montal.
Guillermo986
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23 Marzo 2025
10,0