Mirador de Na Foradada en Deià

Nos sentamos de manera que los 8 tuviéramos vistas al mar. Eso realmente me impresionó. La comida era demasiado grasosa para mí y eructé toda la tarde. Por supuesto, el ambiente es fantástico con esta vista.

Llegamos a las 17:15 horas y ya no servían cafés, porque tenían que ir limpiando la máquina. El negocio parece que cierra a las 19:00 horas. Al final nos hemos pedido dos Coca Cola, ¿a 4 euros cada una? La ubicación del sitio es espectacular, perfecto para disfrutar de los atardeceres, pero el servicio me deja decepcionado. Creo que tres estrellas son justas, para mí tienen muchas cosas que mejorar.

Vaya, excelente ubicación. Qué comida tan deliciosa. El personal es muy amable y acogedor. Definitivamente ven a comer :-) Impresionante

Nos atendió Marina, un encanto, la comida muy rica y vistas espectaculares. Muy recomendable!

Gran vista. No tienes que dejar que la audiencia afectada te moleste.

Uno de los restaurantes más bonitos, justo en la costa oeste con vistas al atardecer. Siempre vale la pena una visita. Es una pena que el bar asociado de arriba (ya no está bien gestionado y está incómodo con muebles de paletas) ya esté cerrado. -1* Anexo: Nuevos operadores en el lugar, el Chillout Bar reabre sus puertas...

Paramos aquí brevemente, sólo para tomar unas copas. A partir de las 18.00 horas ya no hay café y los lugares protegidos del sol sólo están disponibles para consumos de 50€ o más. La vista sigue siendo absolutamente hermosa y los precios son razonables.

Super agradable. Las vistas son increibles, la comida muy buena, relacion calidad precio es excelente. Tanto Marina como Matias nos atendieron genial. Muy recomendable!

Nos atendió Matías, todo un profesional. Vistas excelentes, comida excepcional y trato inmejorable.

Panorama bellissimo, anche la cameriera è simpatica. Abbiamo prenotato il tavolo al bar in prima fila e ci hanno detto che c'è una consumazione minima di 50€ a tavolo, che ci hanno chiesto appena arrivati. Fino a prima del tramonto tutto bene, se non fosse che quando il sole sta per calare le persone si alzano e si mettono praticamente sopra di te con il telefono per fare la foto al tramonto. Magari sarebbe il caso di recintare la zona visto che si chiede la consumazione minima? Ad ogni modo, abbiamo ricevuto diverse spallate mentre eravamo seduti e sicuramente è un'esperienza che non consiglierei. Buoni i drinks, ovviamente non economici; il panino era decente, contando che avevamo chiesto che ci fosse tagliato a metà e il ragazzo quando ce l'ha portato ha detto che ci dovevamo arrangiare. Il bagno non c'è, c'è solo un bagno chimico in una zona non illuminata e per niente sicura. La vista e il gatto che gironzolava meritano le tre stelle.