Mesón Romero en Castril

Riquisima pizza y trato excelente. Patatas bravas muy ricas, con salsa muy buena. Trato excepcional y rápido. Recomendable 100%

1925 muy fresquitas y las pizzas buenísimas

⭐⭐⭐⭐⭐ Muy recomendable, ¡especialmente gracias al excelente servicio! Comimos en Mesón Romero y quedamos encantados! La comida era excelente, recién preparada, con mucho sabor y atención al detalle. La selección del menú es variada y las porciones no dejan nada que desear. Pero lo que realmente hizo que nuestra visita fuera especial fue el excelente servicio que experimentamos. Nos gustaría destacar especialmente a la joven que nos atendió: con su trato amable, tranquilo, mucha paciencia y un notable compromiso, realmente hizo nuestra estancia más agradable. Hizo un esfuerzo extraordinario para cumplir nuestros deseos: siempre atenta, pero nunca intrusiva. Este servicio es ahora poco común y me gustaría darle 6 estrellas. Conclusión: Si buscas buena comida y un servicio genuino y de corazón, ¡has llegado al lugar correcto! Definitivamente volveremos.

La comida estaba muy buena, rapidez a la hora de servir, el trato del personal muy amable y además tuvieron en cuenta los detalles a la hora de pedir, ya que no puedo tomar ciertos alimentos. Fuimos a la hora de comer y volvimos otra vez para tomar el café ya que hay postres realmente muy buenos. Así que lo recomiendo 100%.

Sábado Santo venimos desde Pozo Alcón hasta Castril y no hemos hecho reserva, todos los restaurantes a rebosar y gente preguntando por mesas libres y no hay, finalmente en Castril nos metemos en su casco urbano y encontramos una mesa libre en este mesón (Somos cinco personas) y la queremos dentro porque fuera hace mucho frío. Por supuesto ni hemos leido opiniones previas ni nos podíamos permitir ese lujo pues está todo a tope. Nos atienden rápidamente y nos sirven la bebida eficazmente. Pedimos unas bravas, dos pollos al ajillo, una de magra con tomate y un revuelto con setas. Los platos llegaron en muy buen tiempo, calientes, con cantidades correctas y muy ricos. Las bravas poca ciencia tienen y la salsa no es muy picante. El pollo al ajillo muy rico acabamos el pan mojando en el aceite, la carne magra igualmente muy rica, también el pan cumplió su función mojando y el revuelto correcto. Dos personas pidieron postres y tres cafés, los postres de lujo, caseros y con cierto aire al "Calitos" de Guadahortuna, no creo que los hagan ellos, pero sí se los tiene que llevar un obrador o pastelería de buen hacer. El final de la cuenta 104 € con seis bebidas. Sinceramente salimos a 20 € por persona, un Sábado Santo, sentados de lujo en un mesón, lo veo bastante bien, veo que las opiniones se quejan de los precios, pero es que creemos que por ir a Castril un tercio nos tiene que costar 2 € y un plato de pollo al ajillo 8 € y eso ya es historia del pasado, en Castril, en Granada y para que contar en Madrid o Barcelona.

Comida muy buena, servicio rápido y trato muy agradable Relación calidad- precio buena. Sin duda repetiría.