Melo-Jia en Barcelona

Simplemente espectacular, ningún plato te deja indiferente, y eso que he probado unos cuantos. Es toda una experiencia venir y disfrutar de cada uno de los platos. A destacar los saquitos con foie, las berenjenas, los fideos de boniato y el pollo glaseado agridulce. 100% sitio de confianza

Calidad de comida buenísima y atención excelente, lugar muy agradable Y con mucho estilo

Deberían de mejorar las sillas ya que en la mesa que nos tocó, eran de plástico.

Comida deliciosa auténtico tradicional chino con muy buena relación calidad precio.

Top performer el wonton fusionado en salsa chili

Hacía mucho tiempo que quería ir, y hoy lo hemos probado y nos ha encantado. Tienen platos muy, muy refinados y equilibrados, llenos de sabor y combinaciones de gustos brutales. Hemos comido varios dumplings a cada cuál mejor. Se deshacían en la boca, pura mantequilla, además super ligeros. Incluso repetimos! De todos! El pato pekin estaba riquísimo. El servicio super amable y atento. Volveremos

Un restaurante chino que ofrece una calidad superior a la habitual, la comida está muy buena y se nota que es artesano y cuidan los detalles. Se nota que hacen prácticamente todo aquí. Aunque la calidad la pagas, no es barato, está bien para una cena más íntima si te gusta la comida china de calidad, pero no es un restaurante al que ir a comer si tienes hambre y quieres disfrutar de diversidad de platos. El servicio es muy atento, y el ambiente muy acogedor. No le puedo poner las 5 estrellas porque creo que pagas más de lo que vale, pero es un muy buen chino. Recomiendo los saquitos caldosos de ternera y fua, con cebollino chino, casi 4€ la unidad pero espectacularmente buenos.

Todo lo que hacen es delicioso; ahora bien, los platos son cada vez menos generosos y los precios suben sin cesar. No es lo que era. Soy cliente habitual, quiero decir que la fecha de publicación no coincide con la fecha de visita. De hecho, es una reseña editada, a raíz de las variaciones que he ido experimentando. En el último año he ido en varias ocasiones y la sorpresa siempre es la misma: encarecimiento de los platos. Cordialmente,

Tenía las expectativas muy altas luego de leer algunas de las reseñas. El lugar es muy acogedor y el servicio por parte de todo el personal es muy amable y atento. No teníamos reserva y en un primer momento nos dijeron que no tenían lugar, pero luego nos ofrecieron una mesa que sería ocupada una hora más tarde. Muy buen gesto por parte de la encargada. Los wonton fritos de gamba estaban ricos, nada especiales. El arroz Melo-Jia estaba bien, la cantidad de ternera un tanto escasa. El arroz tostado Ku-Bak interesante. Había comido el arroz inflado más que nada en preparaciones dulces. Esperaba el sabor a tostado, pero no logré identificar mas que el sabor a arroz inflado. El caldo de mariscos que le vierte el camarero a este plato, estaba delicioso dando como resultado un plato muy sabroso y de textura diferente a lo convencional. Lo mejor de todo, la buena atención y la amabilidad del staff.

Un lugar encantador y escondido con comida deliciosa. El pato estaba excelente y el mejor dim sum que probé en Barcelona. Recomiendo el de anguila. El ambiente es tranquilo y acogedor. La comida lleva tiempo, pero vale la pena y enriquece la experiencia gastronómica.