Masia Can Ametller en Sant Cugat del Vallès

Muy buen ambiente. Un sitio más lt recomendable. La carta típica, sin modernizados, no quiero decir ramplona, sencilla, ni aburrida. El servicio lo más justo, lo mejor el acompañamiento a la mesa y la persona que te toma el pedido. Ayuda mucho si dudas. Los camareros sin mucha experiencia (por ejemplo no te rellenan las copas de vino, ni siquiera preguntan). ¿Quizás es normal de la casa?. Sin embargo no ensucia la estancia

He celebrado mi cumpleaños en una sala privada con jardin y ha sido todo un exito! Muchas gracias a Andrea por la gestión!!!! Un 10 de sitio, sin duda volveremos!!!!

Celebramos un día muy especial y fue un trato cercano y muy cuidadoso. El 19 de julio. NORA, nos atendió de forma cercana y cariñosa y el jefe de sala y el camarero que nos cuidaron todo el rato de forma muy cariñosa y profesional. La comida estuvo deliciosa y estuvimos geniales en la sala pirineos. Recomiendo el lugar volveré seguro.

Masía catalana muy bien cuidada, el sitio es muy bonito. Con la comida no salimos muy contentos: los langostinos en tempura con toque picante no tenían picante, la croqueta con curry no se notaba el curry, el bacalao estaba muy seco y duro de mascar. La presentación de los platos es muy cuidada, pero falta la misma atención con los sabores. En cambio, la burrata, la croqueta de cola de buey y los postres excelentes. Las mesas que estábamos cenando en la terraza todas eran de comensales que hablaba catalán, en cambio, ninguno de los camareros ni jefe de sala sabía pronunciar una palabra en este idioma. Creo que debería hacerse un esfuerzo por dirigirse a nosotros en nuestro idioma ya que somos la clientela que sustenta el negocio.

La comida normal,te cobran el suplemento del pan sin comerlo ,de hay mi malestar porque ya si te cobran el pan por lo menos wue te lo envuelvan y te lo lleves o tener alguna cortesia con el cliente. El sitio es muy bonito per esas acciones lo desvirtua

Hay muchas cosas que comentar de este restaurante así que iré a palmos. Es el típico restaurante de bautizos, bodas y comuniones. Muy guapo, con jardines y mucho espacio. El hecho de tener salones individuales según el número de gente que sea el grupo es un buen punto añadido a la tranquilidad de la comida. El servicio es muy atento, pero sin ser pesado. De vez en cuando abren la puerta (tienen los tiempos muy bien calculados) y, al tiempo que retiran platos vacíos, te preguntan si faltas nada. Muy buen servicio. Alex es un crack. ¿La comida? Punto y aparte. Éramos 10 y todos hicimos el menú. El fregadero fregadero fue un poco justito. No llevaron uno por cabeza sino que llevaron algunos platos y los pusieron en medio de la mesa. Estoy seguro de que si hubiéramos estado 6 en lugar de 10 nos hubieran traído lo mismo. Había varios arroces de segundo y la cosa fue variada. El de Montanyà parece que gustó mucho pero el de marisco era de los peores que he comido nunca. Ese no fue el día. Por la calidad y resultado del resto de platos no bajo la nota a 1 pero si un plato no está por salir no puede salir. Aquí alguien de cocinas patinó o quizá sea política de empresa que los platos salgan como sea. No sé pero no puedo poner más nota con un error de chiringuito de playa. Seguramente no volveré. Salí con la sensación de haber salido pagando más de lo que valía. Y eso te quita las ganas de volver.

La compra bien. Los postres són minúsculos.

Muy buena propuesta de Menú con unos entrantes bien equilibrados y varios segundos para elegir, con fideuás, arroces, carnes y pescados para todos los gustos, además de postres y bebidas. Optamos por Lubina al horno con verduras y una fideuá de marisco. 38€ por comensal que dan para mucho. Recomendable!!

¡Muy bien! Una agradable sorpresa: el lugar está muy cuidado, la atención del personal de sala fue excelente y el menú superó nuestras expectativas. Auspiciados por la mención de que son especialistas en arroces, elegimos el arroz del senyoret y ciertamente comprobamos que su autoevaluación es totalmente merecida.

He leído aquí opiniones y tenía miedo, pero a nosotros nos nos tocó esa mala suerte, al contrario, nos trataron super bien, los camareros muy atentos y tanto la comida como el lugar, muy buenos! Repetiremos!!!