Madness Coffee en Alicante

Cafetería, brunch, donde tomar un, tan de moda, café de especialidad y algo para comer. Su especialidad los huevos benedictines sobre una rebanada de pan con diferentes ingredientes como salmón, beicon, rúcula... La de bacon rica, la de salmón olvidable. Sin embargo, un lugar en el que se sirven comidas, con una decoración barroca y objet trouvé: paredes y techos con plantas de plástico, trastos y muebles viejos, etc... necesita compensar esa sensación de vertedero con una limpieza y orden exquisitos para que, a pesar de todo, apetezca comer algo ahí. No es el caso. Aire acondicionado muy escaso: calor. Otra cosa muy común en la mayoría de establecimientos de hostelería es que a pesar de la gran cantidad de camareros el servicio es muy mejorable. Falta de buenos profesionales: gente joven con poca experiencia y quizás poca vocación también. Todos sabemos el por qué. ¿Recomendable? Bueno, si eres joven y todo eso no te importa porque aún estás en "otras cosas", sí. Si ya buscas un completo de satisfacción, hay sitios mejores.

No lo comí allí, pero la variedad de café es impresionante. Además, el ambiente es tranquilo y agradable, ideal para refrescarse o charlar con amigos.

Es un lugar muy bien decorado, con muy buen ambiente, y los productos de excelente calidad

Bonita cafetería. Estaba justo al lado de nuestro alojamiento en Alicante. Desayuno pequeño pero bien preparado.

Es un lugar muy bonito, pero el aire acondicionado, al menos arriba, no era suficiente. Hace demasiado calor para disfrutarlo, pero nos quedamos a tomar un café.

Primera vez que vengo , me han tardo de sorpresa y que acierto mad grande . Nos han tratado fenomenal explicándonos un poco tema cafés porque es una locura lo que tienen y lo bueno que está, el trato del camarero que nos ha antendido maravilloso ( el chico brasileño) , y el sitio mágico volvemos seguro

El mejor café y una excelente selección de comida. El diseño de todo el lugar es fabuloso, desde las pantallas de las cafeteras hasta los caños del fregadero de la moka.

Fui a un brunch y debo decir que definitivamente vale la pena; la relación calidad-precio es excepcional. El lugar es realmente hermoso, felicitaciones a quien lo decoró. Vale la pena alojarse dentro en lugar de en la calle, quizás en el segundo piso.

Visité este lugar por la mañana y me impresionó la variedad de opciones disponibles. Como no soy fan de los desayunos dulces, opté por el clásico café y croissant. Debo decir que fue uno de los mejores croissants que he probado. El ambiente del lugar es único, con cada rincón ofreciendo algo especial. La única desventaja es que siempre está bastante ocupado, y toma algún tiempo para que el personal tome su orden.

La comida es excepcional. Gran menú. El personal es servicial. Gran ambiente. A un precio razonable. 100 % altamente recomendable