Lume en Fuenlabrada

Un buen restaurante que nos ha sorprendido gratamente, excelente toda la comida, hemos cogido para picar unos torreznos, excelentes, crujientes, en su punto, bien presentados y con patata revolcona en la base, para comer hemos pedido un arroz a la gallega para dos, exquisito sabor y muy cargado de vieiras y pulpo, ni que decir que agusto pueden comer tres personas con él, una de nuestras hijas ha cogido una hamburguesa, la que lleva salsa barbacoa, muy buena, con su buena guarnición de patatas fritas caseras.... Y para finalizar un rico café, por cierto, lugar perfecto para celíacos, en resumen buena cantidad de comida y muy bueno todo, sitio al que volveremos, a pesar de que hoy ha sido un día que estaban a tope porque ha sido el día de la madre, los camareros aunque jóvenes han sido muy profesionales, la verdad es que es para felicitarles porque hace tiempo que no veo un servicio así, la encargada muy atenta en todo momento, pero sin ser cargante, tal vez el tipo de música (rock) y el volumen al que estaba no acompañaba demasiado,a lo mejor podrían mirarlo, pero bueno, es una observación personal y como se suele decir, nunca llueve a gusto de todos.....,ya lo he dicho, volveremos!!!

He ido varias veces. Toda la carta es 100% sin gluten (incluidas las hamburguesas, que llevan un pan tipo bollo, blandito y muy bueno). Eso sí: el servicio suele ser muy lento y a veces estresa un poco ver que te dan un tiempo de reserva, pero luego te hacen esperar entre platos. Aun así, la comida merece la pena y suelo repetir.

Todo muy bueno y sin gluten, excelente relación calidad precio y servicio. Por poner una pega, cuando piden varios platos de carne a preparar en la mesa, se llena de humo el local. Volveremos.

Fuimos un grupo de tres para comer. La comida está espectacular, el precio es razonable y la variedad de productos muy positiva. Quería destacar la tan buena atención por parte de los camareros. Fueron muy muy agradables y serviciales. ¡Profesionales al máximo! Se nos enfrió la piedra un par de veces y la cambiaban al momento. Todo genial. Volveremos sin duda!!!! La única pega es la música (un poco alta para nuestro gusto), ya que costaba seguir una conversación.

Un restaurante con ambiente acogedor y servicio impecable: atentos y muy amables. En cuanto a la comida, los torreznos destacaron por su textura crujiente y sabor, y la hamburguesa fue excelente, jugosa y bien acompañada. Sin embargo, la milanesa estuvo regular; cuesta mucho freír un filete de pollo de ese tamaño, el exceso de queso encima le resto gracia. Como sugerencia, sería ideal que el personal advirtiera sobre el queso añadido, ya que muchos celiacos también son intolerantes a la lactosa. El punto dulce lo puso la tarta de queso de Oreo. Cremosa, con el contraste perfecto de galleta y un toque original. Volveremos para seguir explorando su carta.

Hemos salido encantados!!!calidad de 10, atención muy buena. Felicitaciones 👏 Hemos comido una coca de pulpo, patatas revolconas con orejas y solomillo. De postre torrija!la mejor que he comido en mi vida

Me encantó todo, desde la presentación de los platos hasta el sabor. Un sitio altamente recomendable.

Hemos venido a comer y el lugar es simplemente espectacular en todo además la carta es 100% SIN GLUTEN. El ambiente del restaurante es muy bonito, tiene una ambientación con toques de mar y montaña con detalles en paja con grandes cristaleras y es muy luminoso. Los camareros te atienden muy bien y es bastante rapido a la hora de servir la comida. En cuanto a la comida, el sabor es excepcional, la raciones son enormes (hemos tenido que llevarnos parte de los segundos) y la presentación de la comida es bonita lo que llama a comerla. Hemos pedido de postre una tarta de oreo y aun estando llenos no ha quedado nada. El sitio es perfecto para una comida de fin de semana de relax lo aconsejo indudablemente y por nuestra parte repetiremos.

Comida bien, pero SIN PRISAS. Entramos a comer a las 3 y el segundo plato lo comimos a las 5. Muchos clientes para poco espacio, por lo que creemos que sería más para picar algo que para pedir platos más elaborados.

Mi hijo es celiaco y estuvimos comiendo con unos amigos.La comida muy rica y además la carta gluten free lo cual es una maravilla cuando uno de los comensales es celiaco.Probamos varias cosas y todo muy rico especialmente unos nachos y el coulant de queso espectacular.Volveremos seguro.Es genial encontrar sitios así donde los celiacos pueden disfrutar de una buena comida.