Lois en A Coruña

Encontrar el hotel fue el primer reto. Encontrar aparcamiento fue mucho peor. Las plazas de aparcamiento cerca del hotel están en un garaje subterráneo a dos calles. No conviene llevar mucho equipaje. Con 23 °C fuera, la habitación estaba muy cargada. El aire acondicionado, incluso a máxima potencia, apenas consiguió bajar la temperatura notablemente. Las habitaciones son bastante pequeñas, pero no importa. No me importaría que la ducha solo midiera 80 x 80 cm, pero dadas las fluctuaciones de temperatura del grifo, sin duda merece la pena comentarlo. Normalmente me ducho con agua bastante caliente, pero incluso con el agua tibia, de repente se puso tan caliente que, por instinto, quise evitar el chorro caliente. Por desgracia, eso no es posible con una ducha de 0,65 m²... El desayuno es opcional. El ruido de la cocina se oía claramente en la habitación desde las 7:30. Probamos el buffet de desayuno y decidimos saltarnos el desayuno. Pero parece que vale la pena pagar 9 € por persona. La ubicación es probablemente lo mejor del hotel. Está en plena zona peatonal y a solo 5 minutos a pie de la gran playa.

El hotel es muy sencillo pero coqueto. Está muy bien ubicado, el desayuno excelente; también la persona que atiende el comedor.

Fuí con mi señora a comer.Pedimos sardinas de entrada y luego bacalao y carrillera todo muy bueno.Muy recomendable.El servicio muy bien.El lugar muy acogedor.

La habitación está limpia , el servicio es muy amable y para cenar tienen una carta bastante variada.

Hotel muy bien ubicado. Habitación y baño correctos y muy limpios. Cama cómoda. Relación calidad precio correcta

Este lugar destaca por la calidez de todo el personal, las habitaciones son muy cómodas y completas. La limpieza es impecable. Y además cuentan con un restaurante con muchas especialidades de la zona.. Altamente recomendable, me costó irme, estaré esperando volver!

Hotel muy céntrico y personal encantador, todo facilidades. Muy recomendable ya que también está reformado e impecable.

Aunque es un poco complicado acceder al hotel ya que está situado en una zona peatonal, disfrutamos de nuestra estancia allí. El hotel dispone de parking en un parking cercano (Los Cantones) al que recomiendo acudir directamente siguiendo las instrucciones del hotel. Se trata de un hotel de tamaño humano, donde el trato es amable y las habitaciones están muy bien equipadas. Tuvimos la oportunidad de cenar en el restaurante y también disfrutamos de los platos que nos sirvieron (calamares a la plancha, croca de ternera). Recomiendo este hotel.

Pequeño bar de tapas - una tienda al lado del restaurante, donde se puede comprar vino y aperitivos - para beber y comer que en el restaurante - muy cool concepto!

ambiente muy ruidoso, nos fuimos sin tomar el postre porque no podíamos hablar. El resto bien