Lo Caragol en Lleida

Maravillosa comida y servicio, repetiré!

Estupendo restaurante, solo hay que ver cómo se llena cada día a mediodía con su menú, calidad y buen precio.

Relación calidad-precio muy correcto, ¡por el precio que pagas a día de hoy no se puede pedir más!

Hemos comido de 10. Los garbanzos con espinacas y bacalao estaban de chuparse los dedos, el osobuco muy bien cocinado, se deshacía al comer con unas verduras salteadas buenísimas. He probado la paella de los otros comensales y estaba genial. La crema catalana riquísima. El servicio rápido, amable y profesional. Se nota que es cocina tradicional como las de la abuela. Hemos venido muchas veces y nunca nos defrauda. El precio de fin de semana es muy adecuado con su calidad.

Menú correcto relación calidad precio

Cocina casera con buena calidad y cantidad, el servicio rápido y bueno, totalmente recomendable 👌

Para el amante de los caracoles, los mas sabrosos que he probado en Lleida. Buen precio

La comida estaba muy buena aunque mi postre me decepciono un poco pues pedi Mel i mato esperando que fuera casero y me trajeron el mato envasado y la miel tambien con un mini envase como de mermelada. Otro de los comensales pidio un musico esperando frutos secos y le trajeron un pastel casero buenisimo. No se entiende la diferencia

Lugar que debes reservar, contundente

Teniamos reserva para las 14:00 horas. Veniamos de Barcelona y por problemas con el coche llegamos 10' tarde. A las 13:58 llamé para avisar que tardariamos más o menos 10' nos dijeron que no habia problema. Llegamos a las 14:10, esperamos en la entrada 15 minutos hasta que nos dieron mesa. Tardaron 15' minutos más en venir a preguntar que queriamos pedir. Como la elección fue caracoles tuvimos que esperar 15' más (en la carta ja indicaban el tiempo de espera para caracoles). Cuando los sirvieron estaban crudos, nos quejamos y los pusieron a cocinar unos. minutos más, deben tener problemas con las brasas porqué cuando los volvieron a traer algunos estaban un poco quemados y otros seguian crudos y llenos de baba. Tuvimos que esperar un buen rato a que nos tomaran nota de los segundos. Uno de los platos era pollo a la planxa y otro carne de cordero estofada. El pollo estaba crudo y la carne salada y la salsa muy fuerte servida con patatas estofadas y patata al horno. Me pregunto porque tal muestruario de patatas. Llegados al postre y despues de dos horas de haber llegado al restaurante ja no quedaba apenas nada para elegir. Lo tengo claro, no voy a volver.