Restaurant Les Vinyes en Martorell

Todo muy bien, la comida muy buena y la atención recibida inmejorable. Buena relación calidad precio. Volveremos.

Tuve el placer de visitar el Restaurante Les Vinyes en Martorell y la experiencia fue excepcional. Desde el momento en que llegamos, Antonio nos brindó una atención impecable, haciéndonos sentir como clientes de toda la vida. Su dedicación y la agradable charla que compartimos añadieron un toque personal que rara vez se encuentra. La recomendación del vino del Penedès por parte de Antonio fue acertadísima; este vino, reconocido por su calidad y tradición en Cataluña , complementó perfectamente nuestra comida. La ensalada de mango fue una delicia, fresca y equilibrada, y el chuletón, madurado durante 30 días, alcanzó la perfección en sabor y textura. La carta del restaurante ofrece una variedad de platos exquisitos , y una selección de vinos y cavas destacados . El ambiente acogedor y la atención personalizada hacen de Les Vinyes un lugar altamente recomendable para quienes buscan una experiencia gastronómica memorable. Sin duda, regresaré para disfrutar nuevamente de su excelente cocina y hospitalidad.

Acogedor, buen ambiente y buen servicio. Cocina muy buena en general

Canalones caseros para el día de San Esteban

Comida buenísima. Menú para llevar muy bien de precio y las porciones muy completas. El dueño un encanto y siempre les llamo para recoger a las 12h y el trato es genial.

¡Bravas deliciosas! ¡Un regalo absolutamente recomendado! Su barbacoa de bistec y cordero también es maravillosa, aunque los acompañamientos son un poco deslucidos en comparación. Si alguna vez vuelvo a estar en el vecindario, definitivamente regresaría.

Menú de sábado bien cocinado pero escaso. Largos tiempos de espera . Durante las casi 2 horas que duró la comida , pudimos observar que dan una clara preferencia a la opción de carta .De haberlo sabido quizás hubiese sido nuestra opcion.

Todo muy correcto, lástima que los golpes que he ido, el restaurante olía a ambientador de WC.

Lo cierto es que sólo tengo palabras bonitas para este local y sus trabajadores. Son personas encantadoras, nos atendieron de maravilla pese a que llegamos más tarde de la hora que teníamos reservada. La comida es espectacular. La ensalada de burrata y mango deliciosa, el rape magnífico y el arroz de verduras muy recomendable también. La decoración es bonita y agradable. Además, el baño está impecable. Nada malo que decir. Pienso volver si tengo ocasión.

Sorprendente experiencia gastronómica, gran calidad, sabor riquísimo y la atención magnífica. Lamentablemente será difícil repetir dado que soy de Córdoba y me pilla algo lejos. Totalmente recomendable.