Las Bodegas de Clavería en La Fueva

Está delicioso. Los caracoles son geniales. Pero la carne, la carne es lo mejor que he comido nunca. Especialmente con hueso, es un tipo especial de orgasmo gastronómico.

He ido a pasar unos días a Huesca con mi familia y el último día de vuelta este restaurante nos pillaba de camino, así que decidimos ir a comer. El restaurante se encuentra en un pequeño pueblo, cuyo es muy acogedor, el servicio, rápido y atento, y respecto a la comida, poco puedo decir, sin exagerar, una de las comidas que más e disfrutado de toda mi vida. Me comí un plato de macarrones, un chuletón de 1kg300, una bandeja de caracoles a la llauna compartida y el postre. Impresionante. La carne, insuperable. Ya no solo es la comida y el servicio, el precio nos pareció muy bueno. La comida que dicho antes solo era lo que yo comí, luego sumándole platos de mis padres y hermano, salió una cuenta de 150 euros. Des de luego volvería a Huesca solo por ese restaurante. Enhorabuena por la comida, servicio y calidad!!

Hemos comido hoy con mi marido y nuestra podenquita, Que podamos comer con nuestra mascota es importante La comida excelente El trato recibido excepcional La relación calidad/precio muy buena Gracias por todo

He ido a comer con mi mujer y mi mascota la cual ha sido bien recibida Para nosotros es vital que haya locales que nos acepten puesto que si una mascota no molesta debería poder entrar, puesto que yo tengo 2 hijos y también habría que ponerle freno a la entrada a restaurantes a niños maleducados y escandalosos La comida genial, el servicio excelente. Tienen hospedaje que acepta mascotas y cuando vuelva seguro que me hospedó aquí Gracias por el trato recibido Un abrazo

Trato genial. Muy amables y comida excepcional.

Buen sitio para comer, sobre todo para las personas que tenemos saque, cantidad y calidad. El precio justo con la carta. Los alrededores te permiten pequeñas rutas caminado dejando el coche en el mismo parking del restaurante. Tranquilidad total.

Preciosa casa rural con buena familia anfitriona una pasada de gente la dueña que es una señora mayor es un amor, estuvimos toda la cena hablando con ella

Me a encantado el servicio y atención. La comida exquisita unos caracoles a la lata o llauna . El entrecot con medio kilo o más y hacértelo al punto. La amabilidad a la hora de escoger el postre café,y chupito.muy recomendable y bonito para llevar a familia y amigos.el lugar con bonitas vistas y muy tranquilo. Se nota la experiencia y buen hacer de profesionales. Volveré con mis amigos.

Sin duda, un sitio de 10. Tranquilo y ubicado de tal forma que puedes moverte fácilmente y aprovechar los alrededores en coche. Comida de calidad, muchas opciones para elegir y platos muy generosos! No hay carta en papel, pero no hace falta, porque se la saben al dedillo y te resuelven cualquier duda en el momento. Yo elegí una ensalada de queso de cabra de primer plato, unas chuletas de cordero de segundo planto, y para terminar de postre un sorbete de fresa con tequisandia y café. Habitaciones muy cómodas, limpias y completas. El entorno tiene varios salones y terrazas. Tienes opción de bajar al río y hacer rutas! Y lo más importante: puedes ir con tu mascota y eso es un gran detalle. Antonio y su hija Melisa hacen fácil la estancia en su casa rural! Sobre todo quiero darte las gracias a ti, Melisa, por tu sonrisa, tu empeño y por estar pendiente de todo! Gracias por vuestra labor y por un sitio tan bonito, tan bien cuidado y tan lleno de paz. No puedo no mencionar a la abuela Laura, que transmite felicidad! Gracias por tu cariño! Gracias a toda la familia, de verdad, ha sido un verdadero placer. Volveré, estoy segura.

La atención por parte de Melisa es inmejorable, la chica es super atenta y cariñosa. Comimos super bien, los platos tienen buena cantidad y esta muy buena la carne Si que es verdad que tener carta para ver los precios pues mejoraría mucho.