La Vieja de Jonay Hdez en Palma de Mallorca

He ido tres veces, ya que como medio canario que soy, me generaba simpatía la temática del restaurante. Lo siento pero no habrá una cuarta vez. Se nota que el cocinero y los camareros tienen estudios de hostelería: el primero por técnica, y los segundos, por la excelente atención al cliente. Pero hay varios problemas: el primero y quizá el más preocupante es que a los platos, en general, les falta gusto, sabor, sentido, potencia. Y segundo, la relación tamaño de la ración/precio, totalmente fuera de lugar. Por ejemplo, el ceviche a pesar de estar bueno, la ración era muy pequeña; los huevos con trufa necesitan algún acompañamiento -por ejemplo patata-, y quitar el pan con anís típico de Canarias, ya que se le come el sabor a todo el plato; las croquetas de gofio técnicamente son un 10/10 pero no tienen sabor, y la gelatina tampoco aporta nada; el plato de las manitas de cerdo me supo muy muy raro, no me gustó nada; los tacos estaban bastante buenos, pero un poco escaso el plato; el canelón de ropa vieja estaba bien, pero le faltaba sabor al relleno; la trufa palmera no tiene gracia ninguna … No sé, creo que deberían replantearse algunos platos y sobre todo, el precio o la cantidad. No es normal desembolsar 80-90 € por persona y salir con hambre, y además, con la sensación de que has comido comida técnica, bien hecha, pero no especialmente rica. La cocina canaria se caracteriza por el tamaño de los platos, las especias, la intensidad, las horas de chup-chup, el precio moderado … y yo aquí no lo percibo.

Buena atención y buena comida. Precios razonables vistas las cantidades y presentaciones. Fuimos con 5 niños, y nos sentimos muy bien. No es el mejor sitio para niños pero la plaza en frente sirve para dejarlos sueltos, y el personal ayudo todo lo que pudieron.

Comida rica y bien elaborada, con sabores originales, buena cocina. Por contra, los platos ofrecen raciones muy escasas, diría que ridículas (tapitas de dos bocados). Incluso pidiendo pan, nos trajeron dos rebanadas -éramos cinco. El precio es excesivo, no bajando de los 50€/persona una comida tan escasa.

Un interesante restaurante canario con una buena selección de vinos.

Un restaurante muy original, con una propuesta fresca y divertida. La cocina abierta es un plus

Una maravilla la gastronomía ...!

La presentación un 10, la comida sabrosa. Pero como canaria he de decir que me encanta la comida fusion, agradezco que se acerque nuestra comida a mas sitios pero la esencia de la comida canaria se acerca en este restaurante y da a conocer parte de nuestra gastronomía. Pero no hay nada como una ropa vieja casera, una vieja fresca...un potaje de berros (sugerencia para el chef jajaja) animo a la gente a viajar a las islas canarias y probar los platos canarios caseros, pero tambien animo a los mallorquines a acercarse a la vieja de jonay a probar nuevos sabores ...el postre hulk...una maravilla

100% recomendable!! El canelón y la oliva rellena estaban espectacular.

Por fin volvimos a La Vieja. La verdad es que nos hemos vuelto a sorprender. Sabores auténticos, servicio impecable y muy buen ambiente. Gracias al equipo por la experiencia.

Cocina creativa, sorprendente, sabrosa… Diseñada. No es solo lo que comes, que ya es excelente; es además el soporte (la vajilla) que acompaña el concepto de cada taco, plato o postre disfrutado. Agradecemos también la atención: desde Shía, la divertida camarera mexicana hasta cada uno de los que nos atendieron. Muchas gracias! Por último, felicitaciones al chef y al equipo que ha conseguido. Repetiremos!