La Trini en Barcelona

Todas las tapas q pedimos eran exquisitas el servicio fue muy rápido. La única cosa que no nos gustó, fue que nos quitaron los vasos vacíos antes de pedir la cuenta......para invitarnos a salir para dejar la mesa libre. Es uno de los errores mas graves en la gastronomía, y es por eso que no voy a dar 5 estrellas.🤷🏼

Esta fue una recomendación local para mí y algunos amigos, por lo que las expectativas eran altas. El personal no era nada amable y se sentía bastante grosero. Las bebidas eran realmente buenas, con vermut excepcional, sin embargo, la comida no fue tan increíble como esperábamos según el precio y las críticas. Por la cantidad de dinero que gastamos y el servicio, no lo recomendaría, ya que hay muchos lugares más asequibles y mejores en la zona.

Elegimos el menú fijo que parece cambiar a diario, era realmente excelente comida, buen servicio y excelente relación calidad-precio.

Me encantó el cerdo desmenuzado y los pimientos verdes. Ojalá la paella tuviera una costra en el fondo, pero en general estaba bien, ya que estaba cocinada al dente. El ambiente animado era agradable.

Comida rica y personal muy amable

Solo bebimos vino pero estuvo bien y la atención fue muy buena

Excelente paella pero más la atención de los camareros que a pesar de que llegue casi cerrando la cocina de igual manera me han atendido. El café con leche de los mejores que me he tomado en Barcelona. 🇪🇸 10/10

Tomamos varias tapas para probar, no están mal pero hay mejores en la ciudad. Los cócteles no son una locura... +1 por las patatas y el pan con tomate. el tartar de atún/aguacate no estaba nada sazonado, lástima En conclusión, los productos son de buena calidad pero no están bien cocidos. Servidores agradables y ambiente relajado.

Que no te atiendan en catalán en un restaurante que se vende como "cocina catalana" es raro

Hoy tuve el placer de almorzar en éste restaurante, y la experiencia fue mejor de lo esperado, en gran parte gracias al excelente servicio que recibí. Desde el momento en que llegué, el personal se mostró muy atento. Me recibieron con una sonrisa y me acompañaron a mi mesa de inmediato, a pesar de que el restaurante estaba bastante lleno. El camarero me resolvió mis dudas sobre algunos platos que no conocia con bastante conocimiento y me recomendó el bacalado el cual estaba realmente muy bueno. Lo que más me impresionó fue la rapidez con la que llegó mi pedido. A pesar de la cantidad de gente, no tuve que esperar mucho para que me sirvieran, y posteriormente el camrero pasó a comprobar si necesitaba algo más o si todo estaba bien. Al finalizar, el proceso de pago fue rápido y sin inconvenientes, con el camarero agradeciendo mi visita de una manera que se sintió sincera, no solo un trámite. En resumen, el servicio en este bar de gracia fue ejemplar. Sin duda, volveré en mi proxima visita a Barcelona.