La Trasiega en Getafe

Fuimos a cenar un sábado. La carta es pequeña pero la comida es espectacular, el trato de los empleados es impecable. No es barato pero la calidad es muy buena, sin duda merece la pena ir aunque mejor reservar porque el sitio es pequeño

Increíble comida y servicio! A eso le sumas el trato amable y cercano de Ivan, el dueño, insuperable. Volveremos y repetiremos seguro!

Este restaurante me dejó una impresión bastante positiva. La carta no es excesivamente amplia, pero los platos que probamos estaban bien elaborados. Optamos por un menú del día y la relación calidad-precio fue buena: una ensalada fresca, un guiso muy sabroso y un postre casero que se notaba hecho con mimo. El servicio fue rápido y atento, siempre pendientes de si necesitábamos algo más. El local estaba limpio y la decoración sencilla pero acogedora. Como punto de mejora, las mesas están algo juntas, lo que resta intimidad. Aun así, es un lugar recomendable para comer bien sin gastar demasiado.

Es un rincón con encanto. La comida está muy buena y la atención al público es excelente. Considero que es algo caro pero lo recomiendo sin dudarlo.

Comida estupenda, innovadora, el servicio impecable

Buen restaurante con una cocina que está muy bien ejecutada y con productos de gran calidad. Lamentablemente en la comida que realicé ninguno de los dos camareros que nos fueron sirviendo en la mesa durante el servicio se acordó de decirnos que había algún que otro fuera de carta (en esta caso y por lo que vimos había almejas y piparras) al preguntar al camarero si había algo fuera de carta que se la hubiera olvidado comentarnos, decidió excusarse en que eso es algo que tenían reservado ciertas mesas de cuando realizan la reserva pero que ya no les quedaban… nos resultó muy curioso porque entendemos que ciertas comidas, como en muchos otros locales pueden ser los asados y ciertos platos con alguna elaboración más compleja o laboriosa en efecto es así, pero nadie llama para reservar mesa y unas piparras, las cuales no saben si ese día las tendrá el local,curiosamente después entró otra mesa a la cual el propio chef del local les comentó lo que había y volvimos a escuchar como les decían que disponían de unas piparras fuera de carta a las que ellos sí pudieron degustar. Le volvimos a decir al camarero que nos habíamos quedado con ganas de esas piparras y él en un principio nos dijo que no había problema que las sacaba, a lo que le dijimos, no nos has dicho que no había? dándose cuenta el propio camarero seguido rectificar y nos volvió a decir que no había. En fin de ahí que la nota que le pongo al servicio sea más baja de lo que me gustaría, decir que también observamos que a otras mesas el “aperitivo” de la casa consistía en aceite y unas aceitunas gordal mientras que a nuestra mesa sólo llegó el aceite.

Desde luego un sitio para celebrar algo especial. Tiene tanto parte para tomar algo como restaurante. La comida, independiente de lo que se pida está buenísimo, el producto se nota que es de muy buena calidad y el trato del personal, inmejorable. Se puede aparcar bien porque hay un parking enfrente y al rededor de toda la zona.

Todo de lujo ,el buñuelo de bacalao,costilla ,atún, da igual,espectacular

la comida está bastante buena aunque si eres de buen comer te vas a quedar con hambre. bien atendido aunque con detalles que rebajan la categoría y que hacen que durante bastante rato sea un quiero y no puedo. el menú del día, por 24€ debería dar más opciones

Una experiencia muy agradable, llevaba mucho tiempo intentando reservar mesa hasta que por fin lo conseguí y valio la pena, la atención inmejorable, y la comida un lujo para el paladar, mi mujer y Yo quedamos encantados volveremos seguro 👍