La Posada de Redes en Caso

Pues toda una sorpresa. Dando un paseo por Bezanes, acabamos tomando un vermouth en la terraza y nos empezó a llegar un olorcillo a pote y comida rica. De manera, que quedamos a comer, nos permitió meter a la perrina, comedor chiquitín pero muy acogedor y con una estufa puesta, paredes de piedra y con, decoracion y mobiliario muy limpio, y el baño perfecto. La comida, pues un embutido jamón y cecina correcto, el chorizo de corzo impresionante, y un variado de quesos, casin, cabrales y gamonedo. Después un pote asturiano, con el compango y las fabes muy ricas, quizás un poco caldoso de más, pero el sabor muy rico. El pan calentito, recién sacado del horno. Unos platos elaborados, tanto el de tostás como el de la abuela correctos, no excesivamente abundantes pero lo justo para no acabar empachado. El picadillo buenísimo, los huevos camperos, y las patatas muy muy rica. La sidra, metida en una jarra con agua y hielo para que no se caliente, todo un detalle. Y para acabar, una tarta de queso espectacular. Y repito de queso. El camarero muy amable y servicial, sintiendote como en casa. Pago con tarjeta y precio para ser carta, normal. Pues, seguramente, ya para la primavera, volveré a pasar por allí... todo una gran sorpresa.

Tres dias alojados en Bezanes Aldea en Apartamento 1(chalet muy acogedor) disfrutando del precioso entorno del parque de Redes, y dejandonos mimar en el restaurante "la posada de Redes" (una carta variada, hecha con cariño y varios platos muy elaborados... Y asi de buenos...) han sido unos dias de relajo y disfrute, que nos llevamos en el recuerdo para la rutina del dia a dia... Gracias a todos

Nos ha encantado comer aquí. Tomamos las croquetas, las verdinas y el cachopo. Súper ricas las verdinas.De postre natillas caseras riquisimas. Los dueños son encantadores y nos ayudaron con varias recomendaciones para conocer la zona. Además es dogfriendly. Esperamos volver pronto.

¡Mejor restaurante de toda la zona! Comida rica y abundante. Ellos, los propietarios, encantadores. Jan muy atento y amable. Volveremos si o sí. Muy muy recomendable.

Una experiencia de 5 estrellas. Ana encantadora y con una mano en la cocina que te hace disfrutar con cada bocado. El cabrito espectacular, el pote para comerlo todos los días y los cachopos una obra de arte. Fuimos un grupo de 10 personas y quedamos encantados. Segunda vez que vamos y no será la última.

Comí con mi pareja, yo soy vegetariano y María la cocinera me preparo unos platos buenísimos . Son atentos y muy pendientes de todos , ah los postres también geniales el arroz con leche y la tarta de queso son caseras.

Fuimos un grupo de 20. Me encantó. Muy buena cocina y productos de calidad. Raciones abundantes. Las croquetas espectaculares y el cabrito con patatas exquisito. El broche final...la tarta de queso. Nos prepararon también platos vegetarianos muy ricos. Muy buen trato. El restaurante pequeñito y acogedor. Tiene terraza en el centro del pueblo para los días de sol. Ya había cenado anteriormente verdinas con langostinos. Nos encantaron. Seguiremos repitiendo. Gracias.

Estuvimos cenando este sábado un grupo de amigos y todo fue perfecto, tanto el menú, como la atención, siempre atentos y pendientes. Las croquetas exquisitas, las hamburguesas vegetarianas muy ricas, en fin, todo a pedir de boca. No era mi primera vez y no será la última. Gracias por todo.

Fuimos a comer allí por recomendación de la dueña del apartamento donde nos quedamos alojados Llamé por teléfono para reservar mesa y el propietario fue muy amable conmigo y le comenté que íbamos con 2 perros y me dijo que sin problemas Al llegar allí, nos preguntó si queríamos dentro o fuera y al final comimos en el comedor La verdad es que el propietario fue muy atento con nosotros y nos resolvió nuestras dudas sobre la comida Pedimos Tortos con huevo y picadillo y Cachopo con queso de Casín, champiñones y compota de manzana Tengo que decir que me encantó todo, pero el cachopo con la compota de manzana tiene un saber espectacular Para beber me pedí una botella de sidra que me lo aconsejó y me gustó también mucho Y para terminar, el postre, arroz con leche con azúcar quemado, el sabor y la cremosidad buenísima Sinceramente, volveremos en otra ocasión para seguir probando más platos

Un sitio estupendo en un espacio natural asturiano que no tiene desperdicio. Comida fantástica y trato excepcional. Comenzamos con unas croquetas de queso, una ensalada de la casa y unas patatas con queso Cabrales. Después ponte y cachopo (impresionante el de cecina!). Y de postre, la tarta de queso un diez y muy bien también el arroz con leche. Volveremos para poder probar el cabrito (vaya pinta el de la mesa de al lado!). Muy recomendable el sitio, la verdad.