La Senderuela en Proaza

Todo muy bueno, buena calidad y atención excelente

Creo que me hice una imagen poco correcta a través de las reseñas de otros. En principio la fabada estaba correcta pero algo picante y entera, no debe a mi gusto. La ensalada con trompetas de los muertos y pimientos de piquillo ( bote) vale. El entrecot se salva por poco y por la cantidad. Los postres caseros solo el arroz con leche buenísimo. El servicio es de lo mejor.

Comimos allí de casualidad un menú de jornadas de otoño y nos sorprendió muy gratamente. El pote de 🌰 castañas impresionante, el jabalí de 10 y la compota de manzana súper sabrosa. Un 10 tambien para el servicio y el local. Volveremos seguro

Jornadas de la seronda con pote castañas, jabalí guisado y compota manzana. Pusieron dos turnos de comida, 13:30 y 15:30. Llegamos a las 15 por si desocupaban la mesa con anterioridad, pero acabamos entrando al comedor a las 15:50, y tomada comanda a las 16:00. Entiendo que si se ponen dos turnos, y el segundo ya es a las 15:30, un horario suficientemente tarde, hay que ser escrupuloso al respetarlo. Comedor trasero, algo desangelado de decoración y frío. Respecto a la comida ningún pero, pote exquisito y buena ración, jabalí con salsa algo floja y no muy ligada pero muy bien punto y sabor, y compota muy rica. Servicio muy amable y rápido por el chico que nos atendió. Sería una nota de 5 si hubiesen respetado el horario como lo hacemos los comensales. Si das turnos, entiendo que a las 15:15 ya debe estar la mesa vacía y montada para el siguiente turno, puesto que yo también prefería comer a las dos pero elegi el segundo para evitar que me levantarán y comer tranquilo, precisamente, y eso todos lo sabíamos, luego hay que exigir a los clientes del primer turno que dejen la mesa libre en el horario establecido, y sino hubiesen escogido el segundo turno, es lo que hay.

Jornadas de la seronda con pote castañas, jabalí guisado y compota manzana. Pusieron dos turnos de comida, 13:30 y 15:30. Llegamos a las 15 por si desocupaban la mesa con anterioridad, pero acabamos entrando al comedor a las 15:50, y tomada comanda a las 16:00. Entiendo que si se ponen dos turnos, y el segundo ya es a las 15:30, un horario suficientemente tarde, hay que ser escrupuloso al respetarlo. Comedor trasero, algo desangelado de decoración y frío. Respecto a la comida ningún pero, pote exquisito y buena ración, jabalí con salsa algo floja y no muy ligada pero muy bien punto y sabor, y compota muy rica. Servicio muy amable y rápido por el chico que nos atendió. Sería una nota de 5 si hubiesen respetado el horario como lo hacemos los comensales. Si das turnos, entiendo que a las 15:15 ya debe estar la mesa vacía y montada para el siguiente turno, puesto que yo también prefería comer a las dos pero elegi el segundo para evitar que me levantarán y comer tranquilo, precisamente, y eso todos lo sabíamos, luego hay que exigir a los clientes del primer turno que dejen la mesa libre en el horario establecido, y sino hubiesen escogido el segundo turno, es lo que hay.

Menús con productos locales. Cocina elaborada,tradicuonal pero con original mezcla de sabores. Presentación original y apetitosa. Se recomienda los menús elaborados para las diversas jornadas que elaboran a lo largo del año.

Comida riquísima, muy recomendable. Especialista en setas

Trato muy amable y cercano por parte del camarero, la fabada nos resultó espectacular y todo lo que probamos muy rico, calidad precio muy buena. Lo recomiendo.

Su comida es abundante y de calidad, nunca decepciona. Ya hemos ido en varias ocasiones y está todo muy bueno. Recomendado el cachopo, sus postres de setas y todo lo que recomienden fuera de carta. Sin duda lugar para volver en cualquier momento

Boletus plancha; milhojas de tomate, bacalao con setas y flan de setas; rico no, lo siguiente … nos ha encantado y qué decir del camarero que tío más majo y salao; vale mucho el chico!!!