La Capilla Del Parque en Pinto

Encantado con este restaurante. Comida muy buena , el menú diario es muy bueno y variado, y la atención y servicio es excelente. Ambiente muy agradable y tranquilo, se come muy bien. Lo recomiendo 100%.

Local amplio con buena terraza y chimenea para el invierno. Buena calidad y precio en la cocina junto con un buen servicio en mesa. Local recomendable.

Una cena agradable, la carne muy rica, al igual que empanadillas y croquetas. La parrilla de huerta tiene el fallo de que no todo requiere el mismo tiempo de asado y unas cosas muy ricas y otras no tanto. Aún así el rato , el ambiente y el sitio los recomiendo para cenar o comer.

Buen ambiente, zona amplia terraza chula, las camareras un poco antipáticas, se llevan las cosas de la mes antes de terminar, los aperitivos de las consumiciones son escasos, y en nuestro caso hubo q pedirles por favor q pusieran aceitunas, ya que ponían lo q querían. Pero solo en nuestro caso, quiero pensar que no es general, o que tenían mal día, de todos modos volveré ya que el sitio es muy acogedor.

Un entorno espectacular, puedes dejar a los niños jugar por los alrededores. Me encantó la parrillada de verdura y el solomillo. Recomendable 100 por 100

Lo peor es el servicio. Tardaron muchísimo. Mi marido pidió varias veces otro azucarillo para el café y nunca se lo trajeron

Es un sitio muy bonito y acogedor, además cuenta con asientos cómodos y un comedor interior acristalado en el que ves el parque entero. En invierno tiene chimenea. La terraza es enorme lo que hace que sea ideal para ir con los niños mientras juegan en el parque. Tienes la posibilidad de pedir la bebida con o sin tapa, las tapas son ricas y recién hechas, además incluyen los “monaguillos” que son unos bocadillos pequeños muy ricos. Es un sitio genial para comer, además las raciones son generosas y muy ricas. Si te gustan los sitios bonitos, alejados del ruido en los que puedas hablar es ideal. Una cosa que me parece fabulosa es que siempre tienen algo de jazz de música de ambiente suave, nada estridente. Es bastante grande y para celebraciones creo que es muy buen sitio.

Restaurante con cristaleras enormes, y terraza con entorno en un parque, el interior es bonito, está decorado con mucho gusto, raciones abundantes, de calidad, a buen precio, las tapas con la consumición incluida a 4 euros son muy variadas y están bien de tamaño. Las camareras son muy agradables y profesionales. Nos ha gustado.

Como todo es siempre superable. Pero tanto el local, comida, raciones y sobre todo el trato muy agradable. Solo una cosa, aviso que las raciones son enormes, pueden llegar a comer 2-3 personas. Me atendió una chica que se llama Rosana, un encanto. Gracias

Calamares muy malos sabían a viejo