La Cantonada en Calella

Tu bar es perfecto. Las bebidas son perfectas y la gente es la mejor. Tu máquina de casino es la mejor que existe.

Hola, esta barra es tan perfecta que acabo de ganar 3 veces mi dinero en la máquina tragamonedas.

El lugar parece más local que turístico. Es un establecimiento familiar, con un servicio amable y una excelente comida inglesa. Vale la pena volver a probar los calamares fritos y la ensalada de queso. ¡La mejor sangría de Cataluña!

Uno de los lugares más sabrosos y acogedores de la zona (hay 3 o 4 que merecen la pena). Un restaurante familiar con un toque personal en todo lo que comparten. Deliciosas alitas de pollo con patatas fritas microcrujientes, costillas que se deshacen en la boca y las mejores aceitunas verdes de la zona. Vale la pena contactar con este negocio familiar. Volveremos. 🫶

Los descubrimos de casualidad, pasamos por su terraza y al ver el ambiente y las tapas no dudamos en probar. La verdad que la comida era toda casera y sobretodo el servicio muy atento y servicial. Un sitio que piensa en su tierra y no en el turismo. Vale la pena por la calidad y precio. Repetiremos si volvemos a Calella, para probar esos callos caseros

Excelente lugar donde te reciben con los brazos abiertos y se come bien por un precio razonable.

Todo muy bien, tan sólo, la música de la terraza, estaba demasiado fuerte y nada adecuada para el almuerzo. Para comer es necesario que sea una música suave, jazz, bolso, de ambiente, pero no tecno.

Un sitio para comer muy decente, racciones sin escatimar, bien hechas, servicio rápido.... Nada que criticar.

¡Vine a celebrar el cumpleaños de mi tía y fue una experiencia fantástica! Hay ciertos detalles que, aunque sutiles, marcan una gran diferencia. El restaurante goza de una ubicación excelente en una zona con un ambiente muy agradable. Lo que más me gustó fue el nivel de ruido ambiental perfecto; podías mantener una conversación fluida en cualquier punto de la mesa sin necesidad de levantar la voz. La atención del personal fue excepcional, un verdadero 10/10. Los camareros estuvieron pendientes de cada detalle para que la celebración del cumpleaños fuera aún mejor. Se ofrecieron a apagar las luces para el momento de la tarta y aportaron ideas para animar la fiesta. Su atención constante y amable realmente hizo la diferencia. Pedimos una variedad de tapas y quedamos encantados. Las raciones eran proporcionales al precio, y lo más importante, ¡estaban riquísimas! Cada tapa tenía un sabor delicioso, aunque entiendo que esto ya depende del gusto personal. Como alguien que ha trabajado en hostelería, valoro mucho los pequeños detalles. El hecho de que las cervezas y los vasos vinieran ya fríos para poder disfrutar de una cerveza aún más helada dice mucho de la calidad y el cuidado del local. En resumen, recomiendo mucho este local...10/10

La comida es una delicia, y un trato muy cercano en plena zona turística de Calella