La cantina restaurante en Oroso

Un lugar excepcional. Con comedor interior estupendo (chimenea en invierno), terraza exterior y árboles frondosos para disfrutar de la sombra en día de calor; un rincón delicioso. La carta no es larga, pero nadie saldrá decepcionado, al contrario. Su plato estrella, y parte de su bien merecida fama, son las truchas fritas trufadas de jamón o bacon: son algo sublime amigos. Y la atención es maravillosa, no en vano está al frente la sensacional María, una joya andante de los pies a la cabeza. En un día caluroso de verano o en uno frío de invierno, visítenlo, no olvidarán la experiencia. Ahh, el precio: ajustado, van a recibir una delicia por cada céntimo que se dejen allí.

Comida casera excelente,muy amables.El entorno tiene mucho potencial,el ayuntamiento debería poner más medios,lo tiene abandonado.