La bodega de Quintín en Villarejo de Salvanés

Un acierto este hotel. La escapada nos encantó y su pack que ofrece cata de vinos,cena y desayuno es ideal para una mini escapada . La explicación del señor en la cata de vinos fue maravillosa y la atención de la chica de recepción también!! Muchas gracias. Volveremos ❤️

Fuimos a pasar una noche y hacer la cata de vinos. El lugar es precioso y acogedor. La cata de vinos fue super agradable , instructiva y amena realizada por Alfonso. Recepcionista super amable y desayuno muy completo. La habitación también para destacar , super amplia y con un baño enorme para 2 personas. Lugar donde repetir sin duda.

Una experiencia totalmente recomendable, fuimos mi pareja y yo y la atención desde que llegamos fue muy buena, muy amable la chica de recepción que nos acompañó y ayudó en el excelente y bien surtido desayuno de la mañana siguiente. La habitación enorme, muy acogedora limpia y con un olor espectacular. En cuanto a la cata, Alfonso hizo que fuese muy amena y didáctica para los que no tenemos conocimientos de vino, se pasó volando y la cena degustación deliciosa. Muchas gracias por el buen trabajo que realizáis y por cuidar tanto la bodega!!! Muchísima suerte y que os vaya muy muy bien!!!

Pasamos un fin de semana en este hotel bodega y la experiencia fue muy buena. Por la tarde hicimos una cata en las cuevas que conservan, que resultó muy amena y bien organizada. Después tuvimos una cena con menú degustación, bastante completa y cuidada en cada plato. Las habitaciones del hotel son muy amplias, modernas y cómodas, perfectas para descansar. Como punto a mejorar, el desayuno podría ser algo más variado, aunque en general cumplió. En conjunto, es un sitio muy recomendable para desconectar y disfrutar de buen vino y buena comida.

Hermosísimo hotel/bodega. Atención súper cálida tanto de la recepcionista como de Alfonso, el hijo de Quintín, que guía la cata de una forma didáctica y excepcional. Recomiendo mucho parar en este sitio si estás de viaje en los alrededores de Madrid. La habitación hermosa, muy limpio todo y la decoración de todo el hotel está hecha con mucho gusto.

Este lugar es lo más parecido a un oasis. Está dentro del núcleo urbano y rodeado de calles estrechas estéticamente poco agraciadas. Ahora bien, el recinto de la bodega es bonito por fuera y estupendo por dentro. Una vez en el interior te olvidas de dónde está ubicado. Tiene silencio y jardines muy cuidados que crean distintos ambientes muy aprovechables para celebraciones, o simplemente, disfrutar de la tranquilidad. Plantas, árboles, piscina, fuente y decoración que evoca el lugar en el que te encuentras, una bodega. Las instalaciones de 10. La recepción está decorada con mucho estilo al igual que las habitaciones y, en general, todo el hotel mantiene una decoración muy cuidada. Si tienes oportunidad, aprovecha para hacer una cata de vinos. No vas a salir hecho un sumillier, ya que no es el objetivo de la misma, pero la cueva es una pasada. Pequeña, pero muy limpia con iluminación tenue y muy cuidada. Alfonso, el dueño, guia la presentación de unos vinos de Madrid y, durante dos horas, te da un repaso magistral para adquirir las nociones y los trucos para diferenciar buenos vinos. Un repaso sobre el proceso del vino adornado con apuntes históricos del pueblo y sus propias vivencias Nunca una cata me ha entretenido y enseñado tanto. Ha sido todo un placer que sin duda recomendaré a mis amigos.

¡Es una auténtica maravilla! Un sitio súper pintoresco. El hotel tiene un estilazo único, que mezcla lo moderno con lo tradicional, creando espacios acogedores con muchísima personalidad. Cada detalle está pensado con muchísimo gusto, desde los muebles hasta los pequeños adornos que le dan un toque único y elegante. El trato y la amabilidad del personal fueron excepcionales. Desde que llegamos, nos hicieron sentir como en casa, con una sonrisa genuina y siempre dispuestos a ayudarte. Las habitaciones preciosas, tremendamente amplias, cuidadas e impolutas. La cata magnífica, con todas las explicaciones de Alfonso. Una experiencia recomendable al 100%. Sin duda repetiremos!

Hemos pasado un fin de semana de relax, ideal para desconectar nos encantó la cata de vinos y quesos destacar la amabilidad de Alfonso, marina un encanto nos trato fenomenal, todo muy acogedor y familiar La cena degustaciom nos gustó mucho. Repetiremos seguro muchas gracias 🥰

Un sitio encantador, muy tranquilo y bien cuidado. La habitación estaba impecable y muy espaciosa. Destacar sobre todo la atención por parte de todo el personal. Nos atendió Marina desde el momento que llegamos al alojamiento y fue muy simpática y profesional en todo momento. Nos hicieron una cata de vinos y quesos muy educativa, muy recomendable para quien quiera iniciarse en el mundo del vino!

Sencillamente impresionante, no esperábamos para nada la calidad del servicio, muy amable y atenta Marina, Habitaciones nuevas y muy amplias, para aparcar también muy bien, aunque fuera en la calle y un jardín para jugar los niños estupendo. Desayuno abundante, de calidad. súper recomendable!! Volveremos seguro!