La Bodega de Ola en Bilbao

Todo muy bien !!! Pedimos gambas de cristal con huevos, muy ricos y presa , eso sí q estaba espectacular. El postre bueno pero 14 euros nos pareció un poco excesivo . De todos modos lo recomiendo.

Cenamos aquí con algunas expectativas, lamentablemente no satisfechas. La comida buena, aunque algunas cosas quizás demasiado básicas (por ejemplo el bacalao frito con salsa tártara) para el precio y la ubicación. El carpaccio de gambas, sin embargo, es excelente. Lamentablemente el servicio no estuvo a la altura: las chicas estaban dispuestas, pero no preparadas y desatendidas. El vino no llegó con los platos, se vertió apresuradamente provocando que formara espuma. Las patatas bravas llegaron cuando habíamos terminado el plato que debían acompañar (y estaban muy saladas). En general el ambiente es un poco frío.

Agradable para una comida informal. Algunos buenos sabores en general. Una persona de servicio que dirige el bar y el restaurante, por lo que tiene poco personal. La mayoría de los platos eran muy buenos, excepto el plato principal, que optamos por el bistec a la parrilla que, aunque tiene un sabor agradable, del corte de 1,2 kg al menos la mitad era pura grasa, lo cual no es aceptable.

¡Muy recomendado para gourmets! El servicio fue muy sencillo, amable y servicial. Recibimos consejos sobre cuántos platos deberíamos llevar. ¡Qué bueno que todo sea apto para compartir, para que puedas probar muchos platos diferentes y sabrosos! Muy linda experiencia, definitivamente la recomiendo.

esta bien el sitio un poco caro para lo que ofrecen, comida rica

Es un restaurante con unos menús degustacion muy buenos y muy bien preparados. Recomendable sin duda. El precio ronda los 80 a 90 euros el menú. El personal muy amable y lo dicho la comida increíble. Recomendable. También hay carta.

Un lugar muy recomendable y con muy buena comida. Y el servicio muy atento.

La Novedad al alcance, sabores y paladares al orden del día. Gracias por estar ahí

Estaba leyendo varios comentarios sobre este lugar. No podemos quejarnos de nada, excepto que los vinos son innecesarios y tienen mucho mercado considerando que es un lugar más informal incluso dirigido por una superestrella Michelin. He estado comiendo en muchos de los mejores lugares y fue una experiencia muy positiva. La noche estuvo tranquila, por lo que no hubo estrés para el personal y el servicio fue razonablemente bueno. Dios recuerde que este no es un lugar estrella sino una segunda opción, por lo tanto, creemos que nuestras expectativas estaban en el nivel correcto. Tomamos el menú degustación a 65 € por persona y fue excelente en todo momento y muy contento de que, debido a mi alergia, los platos de reemplazo fueran de igual alta calidad. Las raciones son grandes y la calidad y materia prima muy buena. La elaboración es menos sofisticada pero muy adecuada al lugar. Definitivamente vale la pena una visita y el menú es excelente y no tendrás hambre.

La señora de la casa con cara amarga no nos infundió mucha confianza al cenar aquí. Ella fue abrupta y grosera. La comida estaba bien, nada especial. El personal del bar es mucho más agradable de tratar. La Bodega de Ola tenía una buena reputación, pero lamentablemente nunca estuvo a la altura.