La Barra del 7 Portes Pla de Palau en Barcelona

Restaurante increíble, una joya escondida, está en la calle trasera del famoso 7 Portes, toda una institución en Barcelona. Es más caro y hay que reservar; este es un bar más informal, pero con la misma cocina y más económico. Las raciones son, obviamente, un poco más pequeñas, ¡pero no mucho! La paella, etc., es para dos, pero quizás sea para una persona si se pregunta. Probé la paella de marisco, las croquetas de bacalao y el flan de postre, y todo estaba excelente. Buena variedad de tapas y platos tradicionales, con opciones vegetarianas. El servicio es muy bueno, sobre todo Soba y Edu, que tienen un montón de sugerencias útiles. ¡Recomendado!

Shiva an y Edu Ambos fueron muy atentos y serviciales al entrar al restaurante antes del cierre. Aun así, nos ayudaron con su deliciosa comida y su increíble servicio. Recomiendo ampliamente visitar La Barra.

Este es uno de los mejores secretos de Barcelona. Forma parte del famoso restaurante 7 Ports. ¡Comparte la cocina con el restaurante principal! Tuvimos la suerte de que nos atendiera Shova. Posiblemente el mejor servicio de sala de la ciudad. Disfruta de una comida increíble sin las complicaciones de una alta cocina. ¡Aquí mismo!

Cené en 7 Portes por mi 40 cumpleaños, lo pasé muy bien, fui a Barra 7 Portes un mes después, ¡Shova estuvo genial! Gracias por su amabilidad y profesionalismo 🙏🏼

Hemos ido pensando que seguramente íbamos a comer muy rico, y así fué! Las croquetas de jamón y bacalao de las mejores que hemos probado en Barcelona. Los canalones y el arroz negro muy ricos los 2! La ensalada de langostinos/tomate no estaba mal, muy pequeña la ración. El ambiente tranquilo y acogedor, volveríamos!

Un sitio muy tranquilo para comer bien y con una excelente atención y muy correcta por parte de Shava! Seguro vamos a repetir la maravillosa experiencia.

Probamos los tres tipos de canelones, y exquisitos los tres.

Sitio perfecto para disfrutar de una comida en tranquilidad y sin ruido. Las mesas son pequeñas, pero no suele haber mucha gente, por tanto es el lugar ideal para mantener buenas conversaciones. Aunque la comida era muy buena, la camarera no hablaba ni entendía el catalán, algo que me parece indispensable en un servicio de cara al público.

Correcto la camarera es muy simpática y atenta todo correcto

Segunda vez que venimos este restaurante, y segunda vez que nos vamos muy satisfechos. Pedimos raciones por compartir, y tanto la presentación como el sabor eran exquisitos. Platos como la ensalada rusa, los huevos rotos con foie, las croquetas de bacalao, y sobre todo el canelón trufado fueron los que más nos gustaron, y sin duda les recomendamos, tanto de plato principal como ración por compartir. A destacar también el servicio (el que fue bastante rápido) del camarero que nos atendió, Xavi, que fue muy amable y atento. Lugar con un ambiente relajado y muy recomendable, volveremos pronto.