KI-JOTE en Alcalá de Henares

Algo Caro pero todo estaba muy bueno.

Esperaba más de la comida de este restaurante, ya que había oído hablar bien de él. Independiente de sus precios, bastante elevados, nos defraudaron mucho los platos principales. Cierto es que los entrantes nos encantaron. Los nogiris de huevo de codorniz y de salmón estaban deliciosos, igual que las giozas, que estaban muy sabrosas y me parecieron muy originales. Sin embargo, el plato de vaca guisada con patatas y arroz, nos pareció muy soso, 4 trozos de carne con patatas zapateras y muchísimo arroz, totalmente descompensado. También pedimos Fideos yakisoba con verduras y lo cierto es que el sabor me recordaba a la salsa de bote. En resumen, muy caro y con sabor agridulce. El servicio muy amable

Isa y Óscar son súper amables y siempre que vamos, ya sea para comer un menú degustación, como un menú del día, o a la carta, todo está delicioso y se nota la diferencia de calidad con otros restaurantes. Gracias

Es un sitio muy chulo, es un buen sitio tanto para tener una cita como para ir con amigos, lo mejor de la comida bajo mi punto de vista es el sushi aunque nos gustó mucho el tartar de atún y el udon con chistorra, los postres están bien pero no es el fuerte del restaurante

La tranquilidad del sitio, el servicio y la comida es impecable. Otro nivel más de restaurante japonés fusionado con mucho, mucho gusto. Repetiremos.

★★★★☆ Mi incursión en Ki-Jote fue un viaje culinario fascinante, donde la esencia española y japonesa se entrelazaron en un ballet de sabores. Opté por el menú degustación y me encontré inmerso en un mundo de exquisitez gastronómica. Desde la sopa de miso reconfortante hasta las gyoza con sabores mediterráneos, cada plato era una oda a la creatividad culinaria. El tartar de pez mantequilla con trufa elevó mis sentidos a nuevas alturas, mientras que las japobravas, con su ingeniosa combinación de sabores, dejaron una impresión duradera. Sin embargo, fue el nigiri de atún flameado el que se destacó como la joya de la corona. Su delicada fusión de texturas y la explosión de sabores hicieron que cada bocado fuera una experiencia sublime. Aunque los platos con arroz eran prevalentes, limitando mi capacidad de explorar plenamente la variedad ofrecida, la experiencia en su conjunto fue inolvidable. Aunque el precio podría considerarse un obstáculo, la calidad de la comida y la experiencia general hacen que valga la pena cada euro gastado. En resumen, Ki-Jote ofrece una experiencia culinaria única que deleitará a los paladares más exigentes.

Magnífico restaurante donde disfrutar de la gastronomía Japonesa . Menú variado y sabroso. El servicio extraordinario, Isa, estuvo pendiente de nosotros recomendando muy acertadamente que comer. Un sitio para volver .

Fui a cenar en pareja. Pedimos de la carta dejándonos asesorar. Comida sabrosa y diferente. El servicio muy atento. Isa nos atendió fenomenal. La torrija de sake, de lo mejor. Volveremos a probar los diferentes menús.

Grata sorpresa este tipo de fusión ,muy buena comida y en cantidad considerable , bien atendidos y bastante rapidos , recomendable 100% , y el trato super agradable, de 10. Repetiremos

He ido varias veces pero esta vez me ha decepcionado un poco. La atencion ha sido un poco desastre, les faltaba menage para poder servir adecuadamente a todas las mesas, han sido bastante lentos sirviendo los platos y la bebida y ha dado lo mismo que fueramos los primeros en llegar, mientras el resto de mesas ya estaban siendo atendidos, a nosotros nos toco esperar. La comida estaba buena pero nada destacable. Me ha gustado mas cuando hemos ido a comer el menu degustacion que pidiendo de carta.