Kabbalah cafe en Falset

fuimos a cenar después de un día magnífico por falsete y alrededores, y la primera impresión fue buena, un local abierto, claro, bien decorado el personal muy atento, en todo momento nos atendieron perfectamente y nos orientaron tanto con la comida, como en el vino, lo que hizo que proviéramos lo que nos habían recomendado, y la verdad es que muy bien. unos caracoles muy buenos, un steak tárter que la verdad no pensábamos que fuera tan bueno, unas alcachofas buenísimas, todo buenísimo. y aparte de unos buenos postres, nos hicieron un café irlandés genial. tengo claro que cuando volvamos a Falset, que volveremos, este restaurante será uno de los que volveremos a prueba seguro.

Fuimos a comer guiados por las reseñas de Google y la verdad que fue todo un acierto. La comida estaba espectacular y la atención fue buena. Al ser una comida muy elaborada y de alta calidad, lo normal es que el precio de algunos platos sea ligeramente elevado. Hubo algunos detalles que no me hacen darle la máxima puntuación pero aún así lo recomendaría.

Llegamos por una recomendación y nos dejó gratamente sorprendidos. La comida está toda muy buena (fuimos seis adultos y pedimos para picar) y muy sabrosa. El servicio fue muy agradable y atento durante el rato que pasamos allí e incluso llamaron por la mañana para ver si preparaban algo especial para los tres niños que venían con nosotros. Y nos prepararon un arroz para ellos fuera de carta. En definitiva, un servicio de diez y comida rica y preparada con mimo. Poco más se puede pedir.

Desde el exterior, el restaurante Kabbalah no parecía muy pretencioso, lo que inicialmente me hizo un poco escéptico. Sin embargo, al entrar, me encontré con un ambiente muy agradable, con música de fondo y una bienvenida cálida. Aunque llegamos sin reserva, el personal rápidamente nos ayudó a encontrar una mesa, explicándonos que casi todo estaba reservado. La carta era clara y variada, con carnes, pescados y entrantes que iban desde lo más tradicional hasta opciones más arriesgadas como comida Thai. La base de todos los platos era un muy buen producto, y la comida fue una experiencia inolvidable. La atención fue excelente, destacando especialmente el asesoramiento en maridajes y vinos por parte de Unai, quien nos ofreció varias opciones de botellas con sus argumentos. La experiencia culinaria, la atención y los tiempos de servicio fueron exquisitos y fantásticos. En resumen, el restaurante Kabbalah es un lugar que recomiendo encarecidamente. Creo que van a funcionar muy bien y, de hecho, pienso explorar más de sus restaurantes. Felicidades a todo el equipo y os animo a seguir trabajando en la misma linea. 100% Recomendable

Superó todas las expectativas que tenía hasta el día de hoy en la gastronomía catalana solamente puedo decir enhorabuena un lugar de obligada parada

Perfecta para ir con pareja/amigos/ o familia

Restaurante a probar y probar y volver a probar. Calidad muy alta mezclada con creatividad y magnífica elaboracion. Muy recomendable

Nos ha gustado mucho, local, atención y comida de 10. Platos originales y con sentido, carta de vinos impresionante. La persona que nos atendió un gran profesional. En resumen, genial.

Restaurante pequeño varias opciones de comida, menú diario muy bueno relacion calidad/precio. Personal muy amable y atento en todo momento.

Todo increible. El rape con verdures y salsa de ostras espectacular. La carne de gran calidad. Los postres buenísimos, especialmente el Tiramisú y la tarta de queso. Cocina de alto nivel. Grata sorpresa. El mejor restaurante que hemos comido en del Priorat.