Esta es una de las joyas por descubrir de Ibiza. Fuimos a muchos restaurantes en los alrededores y honestamente puedo decir que este es uno de los mejores en los que hemos estado. Lo hemos descubierto por casualidad porque queríamos el servicio más rápido y este restaurante tenía la menor cantidad de gente. Pensamos que podría ser una mala señal pero fuimos de todos modos porque queríamos comer y ayunar. Oh Dios, qué suerte tuvimos. ¡La comida es genial! Pedimos una estaca de solomillo y un cordero cocido a fuego lento. Los niños comieron patatas fritas. Todos estos estaban súper deliciosos y el servicio fue amable y de primera clase. En cuanto a los precios, está a la altura de otros restaurantes de la zona donde la comida es mucho peor. Por lo tanto, se lo recomendaría a cualquiera.
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