Hotel Servigroup Montiboli en La Vila Joiosa

Excelente, como siempre, tanto en las instalaciones como, por supuesto, en el trato del personal: son todos muy atentos, amables y serviciales. Muchas gracias por todo.

He pasado los últimos cinco días en el Hotel Montiboli Servigroup en España y, en general, mi experiencia ha sido una mezcla de extraordinaria y frustrante. Empecemos por lo positivo: la ubicación es impresionante, el servicio excelente y la limpieza impecable. Nos dieron una habitación preciosa (Sirius-Torres) con una vista impresionante, un balcón espacioso y cómodas tumbonas; absolutamente perfectas… a primera vista. Por desgracia, nuestra estancia se vio ensombrecida por el ruido constante de los huéspedes de la habitación de arriba. Día y noche, se oía el ruido de muebles arrastrados, objetos cayendo, sillas raspando el suelo y fuertes pasos resonando en el techo. Era incesante e increíblemente molesto. Comuniqué el problema a recepción dos veces, esperando una solución, pero nada cambió. Mientras escribo esto en mi último día, simplemente estoy deseando volver a casa; no para que termine el viaje, sino para poder dormir bien por fin. Es una lástima. Este hotel tiene todo lo necesario para una escapada perfecta, pero la falta de control del ruido nos quitó gran parte del disfrute de nuestra estancia.

Super amables La atención de todo el personal te hacen tu estancia más agradable

Un hotel excelente equivalente bajo mi Opinión, a un hotel de 4 estrellas

NO es un hotel 5 estrellas. Calidad-precio se deberían de mejorar muchas cosas. Hemos llegado con toda nuestra ilusión, y vaya que decepción… Nos asignan una habitación con vistas frontales al mar, no vemos nada (adjunto foto), desconchones en las paredes de la habitación, cero insonorización se escucha a la gente caminar, hablar por el pasillo… La televisión de nuestra habitación y las almohadas, ambas de tercera categoría (Un hotel de esta categoría sin smart tv a estas alturas es inconcebible) La ducha emite un ruido raro por temas de presión. Respecto al complejo del hotel, la piscina es muy pequeña en relación al resto de instalaciones por lo que no tiene capacidad para todos los huéspedes como se quisiera. Personal de recepción poco resolutivo. En resumen, han intentado minimizar costes en cosas básicas que se le pediría a un hotel con este prestigio. La ubicación y el desayuno muy buenos pero por todo lo demás no está a la altura de un 5 estrellas para pagar 300 euros la noche. Una lástima

Tras ocho días en el Hotel Montíboli de Villajoyosa, puedo afirmar que este establecimiento ofrece una interesante combinación de puntos fuertes y débiles. Una ubicación que cautiva a primera vista, pero que esconde algunas deficiencias en el servicio que merecen ser abordadas. Puntos fuertes: La ubicación es simplemente espectacular: el hotel tiene vistas al mar, ofreciendo impresionantes vistas a cualquier hora del día. La arquitectura es elegante y está bien cuidada, con dos piscinas que, aunque no son especialmente grandes, ofrecen un agradable momento de relax. El acceso a la playa es cómodo, aunque no es privada. La habitación era cómoda y estaba bien equipada, y el desayuno merece una mención especial por su variedad y calidad. Tuvimos la oportunidad de cenar una noche en el restaurante principal del hotel y la experiencia fue realmente excelente, tanto en cuanto a la comida como al ambiente. Puntos negativos: Sin embargo, para un establecimiento de este nivel, algunos aspectos del servicio definitivamente no cumplieron con las expectativas. El problema más grave fueron las fallas técnicas: en ocho días, tuvimos que solicitar asistencia tres veces por problemas con la cisterna del inodoro. Una de las llamadas se produjo a las 7:00 a. m., lo que causó considerables inconvenientes. Si bien agradezco la pronta respuesta, la recurrencia de este problema en una propiedad de este calibre es inaceptable. El wifi en la habitación era completamente inexistente, lo que impedía la conexión desde la habitación. Un problema importante en la era digital. Servicio de limpieza: Cuando la atención al detalle marca la diferencia El aspecto más problemático es el servicio de limpieza de la habitación. No se trata de la limpieza en sí, sino de una clara falta de atención al detalle: no se repusieron vasos ni tazas, y el último día no se repusieron ni el agua (una botella por persona) ni las cápsulas Nespresso. Solo después de quejarme en recepción, finalmente me los repusieron, lo que demuestra que el problema no era de disponibilidad, sino de desorganización en el servicio. El servicio del segundo bar/restaurante también se mostró desatento a las necesidades de los huéspedes, lo que confirma un enfoque general que no parece poner al cliente en el centro de la experiencia.

El restaurante nos decepcionó bastante,el servicio amable,pero la hurta una decepción, y el postre...se atraganta,tanta galleta

Perfecto con dos playas junto al hotel y mucha tranquilidad

La experiencia en general maravillosa. Parking disponible, desayuno super completo y rico, acceso directo a dos playitas estupendas, acceso al spa... la habitación amplia y confortable. La limpieza mejorable, aunque los detalles de la botellita de agua diaria y la nevera maravillosos. En general, repetiría el año que viene en el mismo sitio. Gracias por todo

Un lugar muy bonito para visitar. Lo recomiendo. Gracias.