Restaurante La Calerilla en La Iruela

Recomendado, hotel tranquilo y restaurante con vistas increíbles a la Sierra. Hemos estado hospedados mi pareja y yo con mi perrita 5 dias. El desayuno es tipo buffet, es variado y está bastante bien en cuanto a calidad. La piscina del hotel es pequeñita y tiene un jacuzzi pero el agua esta fresquita. Tiene unas camitas para tumbarte que son ideales aunque si hay mucha gente en el hotel es complicado cogerlas. Está curioso ver como bajan las cabras monedas casi a tu lado en la piscina, buscan comida pero es súper importante no darles nada ni tirar comida. Para esto se ve que hacen falta más papeleras por el recinto. Las habitaciones son un pelín justas las estándar pero para 2 personas esta correcto. El restaurante es casi lo mejor, tiene muy buenas vistas la terraza y la comida está increíble. Las chicas que llevan el hotel son todas súper simpáticas. Repetiremos seguro si venimos por esta zona.

Pasamos unos días estupendos en este hotel. La ubicación, el atardecer tomando una cervecita en cualquiera de sus terrazas, el desayuno con vistas, rodeado de naturaleza... Nos encantó! Lo recomendamos y seguro que volveremos.

Hotel con mucho encanto, las instalaciones preciosas, el restaurante y el personal excelentes.

Personalmente solo estuve con mi pareja para cenar en la terraza. La verdad es que las vistas son impresionantes. Se puede ver el atardecer encima del inmenso mar de olivos. Las raciones son muy generosas y el precio muy correcto. La comida está bien. En mi opinión, el único inconveniente que le encontré fue que las mesas de la terraza són demasiado bajitas. Són más aptas para tomar algo que no para cenar.

Nos vinimos encantados de este lugar!!la ubicación es espectacular,en plena naturaleza,la tranquilidad del lugar ,la belleza.Disfrutamos de una magnífica terraza para los desayunos y cenas en los que desconectamos de todo!!Y la comida buenísima y abundante!!Un 10 en todos los sentidos!!

Maravilloso, una ubicación de ensueño, parece un edificio de cuento de hadas, me he quedado prendado de la belleza del lugar, en Serio, el hotel es un lujazo, se come de maravilla, el servicio de recepción, de camareras y en general, muy, muy agradables,atentas, serviciales, un trato insuperable de 5 estrellas, especial mención para Rocío nuestra linda camarera y la señorita de la recepción que nos atendió, rubia ella, no recuerdo el nombre, más amable imposible, pero que todos son estupendos, yo recomiendo este lugar al 100 x 100. Y no suelo dar 5 estrellas. Su piscina, los alrededores, el parking de vehículos gratuito, la naturaleza, la limpieza, un todo maravilloso, volveremos seguro y esperamos que sea pronto.... gracias por todo

Un maravilloso hotel en un espacio natural increíble, todo estaba perfecto

Es maravilloso el hotel, las instalaciones, las habitaciones, las vistas, tiene parking gratuito y el restaurante mejor imposible de todos los lugares donde comí este fue mi favorito la hamburguesa y las croquetas de ciervo increíble y la carrillera ni hablar y lo mejor de todo la atención todo el personal es excelente, repetiré muchas veces más

Sitio 10. Acogedor, muy bien situado, tranquilo, comida riquísima y la plantilla que trabaja allí súper simpáticas. Un lugar donde te hacen sentir que estás en casa.

Fuimos recomendados por el personal del apartamento donde nos alojabamos y motivado por sus magnificas vistas. El.entorno es espectacular, muy recomendable llegar pronto para disfrutar de la puesta de sol romandonuna copa en la terraza. Pedimos de entrante patés de caza, muy buenos, y alcachofas von anchoa que fueron lo peor, porque venían directamente del.bote, frías y con saborazo a conservante, no valían para nada los 16 euros. De segundos, trucha rellena q estaba un poco seca pero.muy sabrosa, hamburguesas de ternera y de venado para los niños en las q la carne estaba bien pero el pan era el típico industrial malo tirando a muy malo. Y para mi, solomillonde jabalí que estaba espectacular de punto y sabor y muy generoso en cantidad. Nos habían recomendado mucho los postres, pero mi sensación es que no son nada del otro mundo. Una tarta de queso muy seca y flan de calabaza. Nada del otro mundo, confirma una vez más mi percepción general de que wn el.90% de las ocasiones no merece la pena pagar 7 euros por postre. En cualquier caso, disfrutamos la cena, recomendaría