Hostal La Font en Les Valls de Valira

14:30 horas el momento ideal para almorzar en España. Elegimos este restaurante conocido hace unas décadas. La elección de nuestros platos corresponde a nuestras expectativas. Chuletas de cordero muy buenas, perfectamente cocinadas, un Mel i mato perfecto y vino de la casa pequeño (pequeño, eso sí) En definitiva, bastante agradable hasta que el dueño del lugar hizo un anuncio verbal recordándonos que los clientes no debían demorar más la salida del local con el pretexto de que los empleados debían adoptar su pose. Verdadero momento de asombro, somos 5 personas de 2 mesas que acabamos de cobrar. No puedo evitar decirle a esta persona que debería habernos dicho la última hora de salida de su restaurante, ella responde diciendo que lo acaba de hacer y le digo que hay formas de comunicarse sin dar órdenes a los clientes que acaban de pagado Terminamos nuestra comida asombrados y salimos de este lugar un poco desilusionados sin un adiós del hosco jefe. Lástima, no volveremos, a pesar de la comida decente, la amable camarera a la que le aclaramos que la propina era para ella y el hijo del dueño mucho más simpático que su cascarrabias madre.

Fuimos a ver el pueblo y nos quedamos a comer. Fue un acierto, se come muy bien y los camareros muy atentos. Una camarera, Roxana se llama, creo, muy simpática. Repetiría la esperiencia.

Ha sido un finde espectacular. Buen trato, Jordi super atento y los camareros tanto en el desayuno como en la comida espectacular. Echaremos de menos a Arturito. Los croissants nos tenéis que decir de dónde son ..que buenos 😍

Acabamos de pasar un grandioso fin de semana en el Hostal La Font, sin duda repetiremos visita . Recalcar la amabilidad en el servicio de restaurante y de habitaciones de todo el personal y especialmente con Roxana que siempre estuvo atenta por si necesitábamos algo en el restaurante donde comimos de maravilla. El Sr Jordi también muy atento y servicial. Felicidades por ser así de bien todo. .

Un buen sitio, comida habitaciones y atención del personal 10/10, y en un lugar espectacular, volveremos a repetir

Un hotelito con encanto y un trato especial

Fuimos solo a comer. La comida es genial buenísima y cantidad que no puedes acabar.... los dos camareros que nos atendieron fueron un encanto creo que uno era el dueño por que mandaba al resto y la chiqueta que nos atendio en los postres y el café super atenta y muy agradable. Ir a comer y sentirte como si te conocieran es muy agradable. Volveremos. Sitio recomendable

Comida casolana del pirineo, después de ruta en moto una buena camida.

Una gran semana de vacaciones en grupo gracias a los propietarios.

Estábamos de viaje por Andorra y buscábamos restaurante para comer, el que habíamos elegido estaba cerrado y un señor nos recomendó ir a Os de Civís que estaba a pocos kilómetros, en la frontera con Andorra. La experiencia fue fantástica, comimos el menú, de primero escudella para tres, nos trajeron una sopera de la que pudimos comer los tres y repetir y aún sobró. Todo acompañado con pan tostado y tomate y ajo para que te hagas tu "pa amb tumaca" Después nos trajeron una buena ensalada y una tabla de embutidos catalanes, bien surtida. De tercero yo pedí unas patas de cerdo con salsa de setas, ESPECTACULAR, la salsa estaba exquisita, mojamos pan los cuatro, los demás cordero y conejo al barbacoa, lo sirven con butifarra blanca, butifarra negra, chorizo y patata asada Nuestro compañero se pidió una ensalada de pato con foie también muy bien surtida. De postre mousse de chocolate bien rica y crema catalana. Con los cafés nos dejaron dos botellas de licor de hierbas para que nos sirviéramos lo que quisiéramos. Todo esto por 124,85 € cuatro personas, con bebidas y cafés. Creo que no se puede pedir más, el lugar precioso y la comida de calidad y rica. El trato fue muy bueno, tratamos con el dueño y su hijo, ambos muy amables y serviciales. Sin duda volveremos.