Horno San Buenaventura en Sevilla

Un lugar mágico, el hotel en sí ya tiene su encanto. El salón una pasada, la decoración e iluminación impecable. Por ponerle un pero, las sillas con incómodas y estamos muy pegados unos a otros. Es verdad que el espectáculo no dura demasiado pero aún así asientos un poco incomodo

Una experiencia preciosa. El concierto Candlelight en Sevilla, tributo a Hans Zimmer, fue emocionante de principio a fin. La música, el ambiente y la iluminación crean una atmósfera mágica. Totalmente recomendable.

Tuvimos un almuerzo muy agradable en el Hotel Alfonso. No todos los camareros hablan bien inglés, pero son amables y serviciales. Me encantó este lugar, incluso en un día lluvioso.

Alojarse en el Hotel Alfonso XIII es mucho más que dormir en un hotel: es formar parte de la historia viva de Sevilla. Inaugurado a comienzos del siglo XX para la Exposición Iberoamericana de 1929, el edificio es una auténtica joya arquitectónica que combina el estilo regionalista andaluz con influencias mudéjares y detalles monumentales que impresionan desde el primer paso. Desde la llegada, el trato del personal es excepcional. El equipo de entrada y los botones te reciben con una amabilidad natural y elegante, siempre atentos sin resultar invasivos. En recepción, el trato es cercano, profesional y eficaz, transmitiendo esa sensación de estar en un lugar donde el servicio está perfectamente interiorizado. El personal de limpieza realiza un trabajo impecable, discreto y constante, y en el desayuno todo fluye con calma y atención, en un entorno que invita a disfrutar sin prisas. Pasear por sus patios, salones y pasillos es casi como recorrer un palacio: azulejos, artesonados, lámparas históricas y una atmósfera que respira Sevilla en estado puro. A pesar de su carácter histórico, el confort es absoluto y está perfectamente adaptado a las necesidades actuales. Un hotel emblemático, con alma, historia y un nivel de servicio a la altura de su prestigio. Una experiencia que recomendaríamos sin dudar a cualquiera que quiera descubrir Sevilla desde uno de sus grandes iconos. Volveríamos encantados. — Sur Estates · Costa del Sol · Lifetime Real Estate

Estuvimos el otro día tomando un café en el hotel, que es una maravilla. Salones preciosos, decoración maravillosa y la cafetería muy agradable con un servicio amable. Lo único malo son los precios casi 7 euros por un té me parece excesivo.

Una de las mejores experiencias hoteleras que he tenido en Europa; sin duda, el mejor hotel de Sevilla. Desde el momento en que entras, el ambiente, el diseño y la atención al detalle hacen que el hotel se sienta realmente especial. El vestíbulo y los interiores están bellamente diseñados, llenos de carácter y elegancia. Nos alojamos en dos habitaciones diferentes, y cada una tenía su propia personalidad: única, auténtica, bellamente decorada e increíblemente cómoda. El restaurante de desayunos es maravilloso. Empezar el día con un café tranquilo mientras disfrutabas de las vistas y la tranquilidad de la mañana fue un verdadero placer. Pero lo que realmente distingue a este hotel es el servicio. Está al nivel de los hoteles de lujo de clase mundial. Giovanni merece un reconocimiento especial; no solo nos atendió, sino que creó una experiencia totalmente personalizada desde el momento de nuestra llegada. Fue atento, atento, siempre disponible y genuinamente cariñoso. Tener a alguien como él cuidando de ti te hace sentir como un huésped de honor. Laura, en recepción, también es excepcional: cálida, acogedora, siempre sonriendo y, sin duda, la cara visible del hotel. Juntos, crean una atmósfera casi cinematográfica... por momentos me sentí como en El Loto Blanco. Y, por último, la ubicación es simplemente perfecta, la mejor de toda la ciudad. Una estancia realmente inolvidable. ¡Muy recomendable y ya estamos planeando volver muy pronto!

Un magnífico patio interior, ideal para disfrutar de un café o una comida en total tranquilidad. El hotel es magnífico y muy agradable: una escapada verdaderamente encantadora.

El edificio es visualmente atractivo y está en excelentes condiciones, y el personal es amable. Desafortunadamente, es imposible dormir bien debido al pésimo aislamiento acústico.

El lugar es espectacular y la experiencia fue inolvidable

Muy grato lugar, céntrico y atendido maravillosamente