Hirusta jatetxea en Aretxabaleta

Escalope y solomillo muy recomendado!

Hirusta Jatetxea es un restaurante ubicado en Aretxabaleta, Guipúzcoa, que ofrece una experiencia gastronómica basada en la cocina tradicional vasca con toques modernos. Situado en la Plaza Ilargi, 4, este establecimiento es reconocido por su ambiente acogedor y su variada oferta culinaria.  Especialidades: El restaurante destaca por sus platos caseros y una amplia selección de pintxos, vinos y postres. Entre sus especialidades se encuentran: • Menú del día: Ofrece opciones variadas que cambian regularmente, permitiendo a los comensales disfrutar de diferentes propuestas culinarias. - Platos a la carta: Incluyen opciones de carnes, pescados y entrantes elaborados con productos de temporada. - Postres caseros: Una selección de dulces tradicionales y contemporáneos para finalizar la comida de manera deliciosa.  Ambiente y Servicios: Hirusta Jatetxea ofrece un ambiente agradable y familiar, con un personal atento y profesional que se esfuerza por brindar un servicio de calidad. El restaurante cuenta con un comedor amplio y una terraza exterior, lo que lo hace adecuado para eventos y reuniones. Además, dispone de aire acondicionado y opciones de pago con tarjeta.  Horarios de Apertura: • Lunes a Viernes: 08:30 – 21:00 - Sábados: 08:30 – 01:00 - Domingos: 08:30 – 15:00  Contacto: • Teléfono: +34 943 22 90 63 - Dirección: Plaza Ilargi, 4, 20550 Aretxabaleta, Guipúzcoa, España  Para quienes buscan disfrutar de la auténtica cocina vasca en un entorno acogedor y con un servicio de calidad, Hirusta Jatetxea en Aretxabaleta se presenta como una opción altamente recomendable.

Comimos un menú del día, las ensaladas bien pero de segundos pedimos sepia en su tinta con almejas estaba salada y fría mi acompañante pidió secreto que estaba seco y cuando le dijimos al camarero solo nos puso pegas

Lugar tranquilo y buena comida.

Fuimos a celebrar un cumpleaños entre semana, y nos sorprendió la rapidez con la que nos querían servir; en nuestro caso queríamos una comida algo más pausada. Preguntaron en más de una ocasión si habíamos terminado, a pesar de que aún había comensales con el plato a medio terminar. El salteado de verduras con caldo de carne, era menestra. Estaba buena, pero no era lo que se describía en el menú. En cuanto a los segundos platos, vajilla muy grande para la cantidad que se ofrecía después. Postres muy básicos.

Servicio rápido. El menú del día nos pareció bastante bueno para la calidad y cantidad de los platos.

Tomamos menú un martes, superrico y bien de precio

Comimos un día de semana y fuera de menú no tenían nada, todo lo que comimos se podía comer, la ensalada mixta era bastante grande y los postres estaban muy buenos, el único problema es que tenían música Latina de telenovela sin parar y cuando llevabas una hora allí llevabas la cabeza loca por la música, por lo demás muy bien. Nos dejaron meter una mascota a la parte del bar, al salón no.