Govana en Alicante

Arroceria con muy buena calidad en los productos

Todo lo que pedimos estaba buenísimo y de precio razonable. A destacar el servicio de los camareros, muy rápidos y muy simpáticos tambien. Un excelente lugar, se lo recomendaría a cualquiera

El mejor arroz del Señoret que he probado! Las alcachofas con gambas al ajillo espectaculares! El sitio es encantador, buen servicio, amabilidad y la comida estupenda. Lo recomiendo 100%

El mejor arroz del Señoret que he comido nunca! Las alcachofas con gambas al ajillo son imprescindibles. No es barato pero asequible. La calidad lo vale.

Pedimos una paella de arroz a banda. Teoricamente tenía que traer gambas y calamares. Gambas, no pasaban de 4 y calamares, o estaban triturados o no existían. Una decepción. Fuimos por las críticas y salimos decepcionados. Paella para dos, muy escasa. No recomiendo.

Espectacular en todos los sentidos.

Hemos estado en alicante y mirando restaurantes para comer paella y este nos a gustado hemos entrado y es como antes y el trato muy familiar hemos cogido el menú de 36 y muy bueno la mojama las croquetas y las almejas más pan con tomate y ali Oli y una paella del señoret muy buena y para acabar una torrija todo buenísimo pollo recomiendo mucho

El arroz a banda exquisito y los postres también muy buenos. ¡Volveremos!

Hacía tiempo que no frecuentaba el restaurante Govana, desde hace muchos años, -como más de treinta- conocido en Alicante, especialmente, por el arroz con pata. Hace unos meses no nos pareció lo mismo a los asistentes, a pesar de ser la misma familia la que regenta el local. Pero el cocinero ya no es el padre -artesano humilde de los fogones que aún sigue los pasos en directo del establecimiento, sin duda el principal mentor -, pues ahora oficia uno de sus hijos y hay pequeñas diferencias. Pero ¡ojo! las principales deficiencias no están en la cocina, sino en el grado de atención y empatía en la recepción, si cabe hoy más antipática que entonces. Hay detalles imperdonables, por mucha adicción que uno tenga al lugar y a la gastronomía. Otro lado es el precio, creo recordar, hace meses, un menú cerrado de 35 € por persona, bebida aparte, que no se corresponde -en opinión de todos los presentes- con el valor objetivo y culinario de lo servido. A todos nos sorprendió, nada que ver con lo anterior. Y una recomendación: la acreditación/fama anterior tiene las patas cortas de esta manera.

El arroz está muy bueno, pedimos menú más un par de platos más y bueno, las raciones pequeñas. El servicio no nos gustó nada, parecía que les supiera mal que les pidieras y todos muy secos. No creo que volvamos.