Gastrobar Micelios en Alcañiz

Fuimos a comer a medio día con reserva. El lugar es pequeño no tiene muchas mesas en el interior, así que mejor ir con reserva. Pedimos varios platos para compartir: Patatas con alioli de ajo asado, tomate anchoado y emulsión de albahaca: para mi gusto no picaban y estoy acostumbrada a otro tipo de bravas pero de sabor buenas. Carpaccio de langostineras con guacamole, salsa de kimchee, fideos de arroz fritos y huevas de trucha del pirineo: el sabor espectacular, una mezcla de sabores que encajan a la perfección y esta muy bueno tanto texturas como sabor final. Huevo a 63° con graten de edulis, cebolla caramelizada y setas: el graten de edulis espectacular con un sabor muy intenso, es uno de mis favoritos sin lugar a dudas. Falso risoto de trigo y boletus ( en parmesano): el sabor a parmesano es súper intenso y está bueno pero recomiendo pedir racion pequeña porque llena bastante. Lo veo todo negro ( filete de pez San pedro en tempura negra, pan Bao negro y mayonesa de kimchee negra): también uno de mis favoritos el filete súper crujiente con el Bao con textura esponjosa y esa mayonesa que lo fusiona todo y hace un toque perfecto. Calidad/precio: adecuada. Limpieza muy buena en todo el local Me sorprendió gratamente que cambian el concepto de la comida de la zona mejorándolo notablemente. Sin lugar a dudas un sitio al que volver.

Hemos venido varios días a hacer turismo por la zona y vamos ha repetir 3 veces ( comida y cena) Cocina creativa y exquisita, y a buen precio. Cada día hemos probado platos diferentes: el arroz "vivo" , espectacular; el carpacio de langostineras, buenísimo.. el brioche de rabo de toro.. único. A esto hay que añadir la atención amable

Fuimos a picar algo y nos sorprendió gratamente, si se busca una carta diferente y probar cosas nuevas es ideal

Un verdadero placer descubrir este restaurante, muy buen servicio, muy buena comida y a precio muy razonable 😊

Comida calidad precio de lo mejor de la zona, todo bueno y una elaboración que demuestra el interés por agradar, mejor reservar, estuvimos un sábado y se llena, además el local no es demasiado grande, así que no os la juguéis y reservad

Estuve cenando, todo bien, pedimos raciones para compartir. Los platos son originales, para comer algo diferente y los postres también muy bien. Eso sí, me pareció algo caro.

Estábamos cerca en ruta hacia casa y paramos para almorzar vistas las buenas valoraciones que tenía el local y que era un menú diario. Estuve mirando la carta mientras comíamos y tenía muchas cosas apetecibles, el menú diario para lo que comimos estaba muy bien ajustado de precio. No es el menú diario típico de batalla que puedas decir que es caro, es un menú que es acorde a la calidad del producto que comes. El local está en una terraza elevada, importante saberlo porque el maps te lleva a pie de calle y se ven sólo unas escaleras, pero si miras hacia arriba se ve el cartel. Un lugar para comer muy a gusto si vas de menú diario los viernes, tiene una terraza exterior y unas pocas mesas dentro. El personal es muy agradable, el servicio es muy bueno y rápido y la comida está genial. Lástima que me coge muy lejos de casa.

Estábamos cerca en ruta hacia casa y paramos para almorzar vistas las buenas valoraciones que tenía el local y que era un menú diario. Estuve mirando la carta mientras comíamos y tenía muchas cosas apetecibles, el menú diario para lo que comimos estaba muy bien ajustado de precio. No es el menú diario típico de batalla que puedas decir que es caro, es un menú que es acorde a la calidad del producto que comes. El local está en una terraza elevada, importante saberlo porque el maps te lleva a pie de calle y se ven sólo unas escaleras, pero si miras hacia arriba se ve el cartel. Un lugar para comer muy a gusto si vas de menú diario los viernes, tiene una terraza exterior y unas pocas mesas dentro. El personal es muy agradable, el servicio es muy bueno y rápido y la comida está genial. Lástima que me coge muy lejos de casa.

Servicio ideal, muy rapido y todo buenísimo

Muy agradable sorpresa el gastrobar Micelios Tomate de Hijar, trucha del Cinca y cebolla encurtida. Papas con alioli de ajos asado. Papada de cerdo crujiente con salsa romescu y brioche de rabo de ternera, yema curada, reducción de PX y foie-gras. La carta de vinos no es grande pero tienen unos cuantos vinos aragoneses y también de Matarraña. De muchos platos se pueden pedir gastrotapas que en realidad son raciones a un precio muy bueno. Sin duda muy recomendable.