03/09/2025: Después de una etapa dura del camino, me supo a gloria el solomillo que probé. La atención genial y lo mejor es que abren temprano.
02/09/2025: Segunda visita:
GUMER: Comimos otra vez, el encanto de la fusión. La innovación se encuentra con la tradición, creando una sorpresa en algo que es familiar. El ambiente, tiene elegancia moderna y es acogedor.
Taco de Langostinos, una entrada atrevida y deliciosa. Los langostinos, crujientes, se combinaron con un taco ligero hacen un bocado fresco y lleno de sabor. Le siguio la Croqueta, una bechamel tan cremosa.
Nigiri Frito, una fusión audaz que combina el atun rojo con el crujiente toque de la fritura. El arroz en el interior, tierno y sabroso, pero realzado por el exterior dorado. Este plato es ejemplo de creatividad del chef. Después, el Tankstu, carne jugosa bañada en una salsa que ofrecía una mezcla de sabores.
Tarta de Limón. La acidez refrescante del limón contrastaba con la dulzura de la base, creando un final ligero.
Destacar servicio en GUMER fue impecable, atento y amable, resaltando su ayuda en la comanda.. Si buscas un restaurante en Pontevedra que te sorprenda con su audacia y te deleite con su sabor, GUMER es una elección segura. Es un lugar para descubrir, disfrutar y, sin duda, volver.
Opinión de mi primera visita:
Un restaurante donde la tradición gallega se viste de creatividad y fusión.
Taco de langostino
Un ejercicio de minimalismo elegante: langostinos frescos, jugosos y caramelizados, servidos en una base crujiente masa de taco. El protagonista absoluto fue el marisco, realzado con un toque cítrico (limón o lima) y hierbas frescas. Simple, pero ejecutado con precisión.
Lengua de vaca estofada
Un homenaje a la cocina de aprovechamient, elevada a gourmet. La lengua, cocinada a fuego lento hasta alcanzar una textura como mantequilla, una reducción de vino tinto con matices ahumados con toque dulce en el brioche.. Un plato reconfortante que desarma prejuicios.
Berberechos
Aquí, el producto brilló por sí solo: berberechos de las Rías Baixas, frescos y limpios, servidos en su jugo. Para puristas del mar.
Bacalao con setas y salsa miso
El plato más arriesgado lomos de bacalao desalado con maestría (sin perder firmeza), acompañados de setas salteadas y una salsa miso cremosa. La salsa, umami y ligeramente picante, muy poco, elevó el bacalao sin dominarlo. Un diálogo perfecto entre Galicia y Oriente.
Postres: Tradición con giro
Canutillos: Hojaldre crujiente relleno de crema muy delicada. Ideal para terminar con energía.
-Crema de orujo Versión ligera del clásico, con el aroma del aguardiente pero sin empalagar. Un final redondo.
Servicio: Detalles que marcan la diferencia
El personal explicó el origen de cada plato (la lengua procedía de vacuno gallego, los berberechos de Carril). Recomendaron maridajes: un albariño para los berberechos. Cercanía sin invadir. Fueron precisos en cantidad y en las recomendaciones.
Precio: Calidad sin ostentación
(4 platos, postre y bebida), Gumer ofrece una experiencia sofisticada pero sin pretensiones. Un lujo al alcance de todos, precio contenido.
Conclusión: Galicia en cuatro actos
El Restaurante Gumer no solo cocina: cuenta historias. Desde la sencillez de los berberechos hasta la complejidad del bacalao con miso, cada plato refleja un aspecto de la identidad gallega. Un lugar para saborear la región con los cinco sentidos.