Casa Ezequiel en Villamanín

Increíble el número de personas que atienden en cada servicio y la cantidad de personal que tienen trajando. Calidad precio genial, mejor dicho, mucho cantidad. Cuidado a la hora de pedir porque las raciones son más que generosas, seguro que no os vais con hambre. Aunque seguro que no os dejan sin comer, pero es recomendable reservar.

Buena relación calidad precio. Rapidez y amabilidad por parte de los dueños y de todo el personal. Merece la pena ir

Terriblemente bueno. Menu especial espectacular. Embutidos muy buenos

Quiero destacar especialmente la atención de Hugo Rodríguez. Desde el primer momento fue impecable: atento, amable y siempre pendiente de que todo estuviera perfecto. Da gusto encontrarse con profesionales así, que no solo conocen su trabajo, sino que lo desempeñan con educación, simpatía y una sonrisa constante. Además, con la niña, estuvo de diez. Tuvo un trato especialmente cariñoso y educado con ella, preguntándole directamente a ella por las croquetas, incluso ofreciéndole el helado y haciéndola sentir totalmente atendida. Ese tipo de detalles dicen muchísimo de un buen profesional. Hugo convirtió nuestra experiencia en algo todavía mejor. Su trato cercano, su rapidez y su manera de anticiparse a lo que necesitábamos marcaron una diferencia enorme. Profesionales así son los que hacen que uno quiera volver. Sin duda, un servicio de diez. Gracias, Hugo, por tu excelente atención. ¡Repetiremos encantados!

Después de 1 hora de cola me dan mesa y me atienden muy bien. Cuando llega la comida entiendes porqué tanta gente está dispuesta a hacer la cola. Bien hecho y generoso en cantidad.

Comimos fenomenal. Croquetas de jamón, ensalada de canónigos, chuletillas de lechal y caldereta y de postre probamos la tarta de queso y el arroz con leche. Todo buenísimo y cantidades muy generosas. Estaba lleno pero no tardaron en servirnos. Nos dejaron comer con nuestro perrito en la terraza climatizada y eso se agradece muchísimo, tanto como la cecina de aperitivo a la que nos invitaron.

Raciones super abundantes, incomparable con nada que vieras antes!!! Y con perro puedes comer en una terraza cubierta sin pasar frío.

Servicio rápido y atento, comida rica y en abundancia, y por encima te dan taper para llevar lo q te sobra

La experiencia brutal ....cuando llegó el segundo plato del menú....chuletillas de cordero fue mi primera palabra para describirlas....Brutal...me hizo ir al pasado y recordar a mi abuelo.....lo recomiendo 100 por cien .

Eramos tres. Despues de andar por el monte y coger unos cuantos cantarellus, paramos a comer algo en Ezequiel. Como siempre habia mucha gente pero como tiene tantas mesas, habia en la terraza alguna libre. Alli nos sentamos. Nos atendieron rapido. Hay no fallan. El camarero y la camarera que nos atendieron muy amables. Habia un menu excelente a 17 e pero para no comer tanto pedimos un par de raciones. - De pincho con la bebida nos pusieron un plato de cecina con aceite y queso. Estaba muy rica. - Una de pulpo a la gallega con cachelos. La racion, como siempre, superabundante, y encima estaba tierno y rico. - Una de Chuletillas de cordero. Unas ocho pusieron. Todas de palo y pequeñas. Estaban muy ricas. Las patatas fritas que las acompañaban tambien. - Postre_ Para repartir, una de tarta de queso con nata casera, que por cierto estaba muy buena. - Bebidas: Dos claras en vaso sidra, agua y una cerveza sin alcohol. El servicio y tempo platos correctisimo. Salimos a 21,50e/pax. Excelente relacion cantidad/calidad/precio. Puntuacion: 7,9/10